Los árbitros, cada vez más estrictos en la aplicación del tiempo añadido

Visionar el VAR, una de las causas para alargar los partidos

Visionar el VAR, una de las causas para alargar los partidos / David Ramírez

Ramón Fuentes

En estas últimas jornadas está ya siendo una norma habitual que los partidos se están prologando bastante tanto en el final del primer tiempo como en el descuento de final del encuentro. Algo que debería seguir poniéndose en práctica esta próxima jornada que arranca hoy viernes

Esto responde al deseo de mejora desde el estamento arbitral conforme va transcurriendo la temporada y aprovechando los seminarios que desde el estamento arbitral mantienen mensualmente con los árbitros y asistentes del fútbol profesional. 

Así a principio de temporada se comprobó que se está perdiendo cerca de un minuto de tiempo efectivo en cada partido como resultado de las distintas interrupciones que se producen en el mismo. Especialmente en las interrupciones generadas a raíz del VAR. Ya sea por las revisiones que se efectúan desde la sala de VOR como en las que realiza el colegiado en el monitor del terreno de juego. 

Ya contamos en SPORT la instrucción que se dio con motivo del primer seminario arbitral donde se les instó a los árbitros de VAR que trataran de acelerar el trazado de la línea del fuera de juego del nuevo operador tecnológico Hawk Eye. 

Pero además, en vistas de la mejora del espectáculo y en el propio desarrollo del encuentro, se les ha recordado a los colegiados que traten de ser lo más estricto posible en la aplicación del tiempo de descuento y donde también influye el tiempo que se pierde en los cambios que realizan cada uno de los dos equipos. Y aquí también la indicación es muy clara en el CTA acogiéndose a las normas de la Internacional Board. 

Basta que recurrir a las distintas circulares que desde el estamento arbitral emite al principio de cada temporada. Por ejemplo la vigente desde la temporada 2015-2016 y donde en su regla cinco aborda directamente este asunto.

En el primer párrafo deja claro que los “partidos tienen una duración de noventa minutos en dos partes de cuarenta y cinco, a los que el árbitro deberá añadir el tiempo que deliberadamente se haya perdido y quede constatado con las amonestaciones que el árbitro haya mostrado”.

Y es precisamente en otro punto del citado artículo donde hace referencia al apartado concreto de las sustituciones: “A cada tiempo el árbitro deberá añadir 30 segundos por cada sustitución que se produzca y un  minuto por cada asistencia médica”.

Es más, dentro de este añadido se deja también claro que no se puede cortar una acción de ataque aún cuando el tiempo se haya cumplido o si justo en el momento de alcanzar los noventa minutos o cumplirse el tiempo de descuento se produce un saque de esquina; el colegiado debe esperar al lanzamiento del mismo para decretar el final del encuentro.

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