LaLiga protege más de 9.000 millones de euros de los piratas

LaLiga Tech es la empresa en la que la patronal de clubes depositó su conocimiento tecnológico para generar negocio

"En el último año hemos empezado a proteger otros contenidos y broadcasters en todo el mundo", señala LaLiga Content Protection

Javier Tebas

Javier Tebas

EFE

El negocio antipiratería de LaLiga ya supera los 9.000 millones de activos protegidos. Ya no solo son retransmisiones deportivas, sino que luchan por detectar falsificaciones de artículos oficiales y hasta velan por series de televisión. Están a punto de cerrar un gran contrato con una gran compañía audiovisual para ir más allá de los goles y las repeticiones.

Lo que comenzó en 2015 como un proyecto para buscar un proveedor que les ayudara a luchar contra la piratería audiovisual, por entonces una práctica a la orden del día, acabó convirtiéndose en un departamento propio que va más allá de los informáticos que idean los sistemas que detectan los servidores, sino que abarca todo un entramado que afecta al área legal, que solicita los cierres de páginas en los tribunales, e incluso trabajo de 'lobby' para solicitar leyes que protejan el contenido.

Como una de las ofertas más relevantes de los servicios que ofrece LaLiga Tech, la empresa en la que la patronal de clubes depositó su conocimiento tecnológico para generar negocio, el abanico de competiciones que son clientes de este servicio antipiratería se ha extendido más allá de las ya conocidas, como el campeonato de motociclismo MotoGP o la Jupiter League belga de fútbol.

"En el último año hemos empezado a proteger otros contenidos y broadcasters, desde Tigo Sports para Costa Rica, la Primera División de Uruguay a través de Tenfield, contenido de Argentina y Brasil con 1190 Sports, y otros en Polonia e Israel", explica a EFE Guillermo Rodríguez, director de operaciones antipiratería de LaLiga Content Protection, el departamento especializado en este ámbito.

Y no solo canales deportivos. Otro tipo de compañías que ofrecen productos audiovisuales se están acercando a la patronal futbolística para reclamar sus servicios y evitar que sus series caigan en las redes de los piratas.

"Anteriormente solo nos focalizábamos en contenido deportivo, pero hemos transmitido ese conocimiento de actuar en el menor tiempo posible a otro tipo de contenidos, desde una serie para el grupo Atresmedia, también series y novelas para diferentes 'broadcasters' de Latinoamérica en Colombia", explica Rodríguez, que participó esta semana en el V Foro EFE Sport Business Days 'Sportech, la tecnología en la industria del deporte'.

La lista va a crecer en las próximas semanas, en las que esperan cerrar un acuerdo para empezar a proteger contenido no deportivo, como series, programas y canales para una gran compañía audiovisual presente en España.

El secreto de los 'hackers' de LaLiga ha sido siempre su tecnología. Herramientas como Marauder (detección de contenido en redes sociales, apps y webs), Lumière (búsqueda de servidores pirata que alojan contenido protegido) o 'Blackhole' (identificador de servidores de televisión IPTV) le han permitido engordar su cartera de clientes y colaborar con entidades públicas como el Ministerio de Cultura, la Policía Nacional o la Guardia Civil.

A ese abanico han sumado ahora 'Fuoco', una herramienta que les permite localizar infracciones contra productos físicos que se venden en internet. "Se dedica a actuar contra infracciones contra productos en la red, de marca, copyright, diseño industrial... que se pueda comercializar en 'marketplaces', páginas web o redes sociales", explica Rodríguez

Una de las dificultades de localizar esos productos fraudulentos es que muchas veces el aspecto de los artículos que se presentan en las páginas de venta electrónica idéntico al producto original. "Hay multitud de páginas que tienen una apariencia real, precios parecidos, pero lo que reciben los usuarios son falsificaciones", señala el especialista.

Para discernir qué puede ser un producto real y qué una falsificación, el área antipiratería de LaLiga aplica algoritmos de aprendizaje automático que toman en cuenta diferentes aspectos: desde el precio de los productos, el canal de venta, los certificados de seguridad de la página web de venta, los tiempos de entrega o los comentarios de los usuarios. Por ejemplo, una web con un tiempo demasiado prolongado puede indicar que se trate de un producto fraudulento.

"Tenemos casos en los que un usuario entra en una página, está viendo un producto cualquiera, pero lo que recibe es una falsificación, el pirata lo que trata es de intentar ocultárselo", explica Rodríguez. Acostumbrados a luchar contra los piratas en 90 minutos, su rapidez y efectividad impulsa el boyante negocio antipiratería de LaLiga.