Ibai Gómez se luce en la goleada del Alavés en Vallecas

Arnau Montserrat

No se entiende al Alavés sin la que seguramente es su pieza fundamental, Ibai Gómez. Hoy de nuevo recital del centrocampista, clave para entender la goleada del conjunto de Abelardo en Vallecas. La expulsión de Abdoulaye Ba por agresión en el minuto 35 puso el camino más fácil para un Alavés que sigue en clara mejoría de juego y resultados.

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Liga Santander

1
5
Alineaciones
Rayo Vallecano
Alberto García, Advíncula, Aboulaye Ba, Amat, Moreno, Elustondo (Emialiano Velazquez 73'), Kakuta, Trejo (Álex Alegría 70'), Imbula, Álvaro García (Embarba 57'), Raúl de Tomás
Alavés
Pacheco, Duarte (Martín Aguirregabiria 82'), Maripán, Laguardia, Ximo Navarro, Jony (Burgui 79'), Wakaso, Brasana, Ibai Gómez, Guidetti (64'), Calleri

Lo dejó claro desde bien pronto con el gol de Ximo Navarro. El central fue el más listo rematando el balón colgado desde una falta lateral para romper la igualdad con un disparo raso muy preciso. 

El partido llegaba casi a la media hora de juego y Kakuta desaprovechaba la primera clara del Rayo con un cabezazo que voló a las manos de Pacheco. inmediatamente después llegaría el gol del empate. Fue obra de Raúl de Tomás tras una serie de rebotes. Pero poco le iba a durar la alegría a los locales porque cuatro minutos después Ibai Gómez se inventó un golazo para enmarcar. Desde la esquina derecha del área, zurdazo a la escuadra, imparable, precioso.

Las malas noticias no se quedaban ya que Aboulaye Ba se iba a la calle tras la intervención del VAR, por agresión. Con 10, una hora de partido por delante y por detrás en el marcador por segunda vez en el partido se le ponía muy cuesta arriba a los locales. Raúl de Tomás casi empata en la última antes del descanso pero su disparo salió lamiendo el palo.

Tras la reanudación del partido en el segundo tiempo, el Alavés se sentía cómodo con un hombre más y acabó por matar el partido. Calleri de cabeza marcaba el tercero e Ibai Gómez anotaba su doblete con otro golazo. Sobrino se la bajó de cabeza y sin que el balón tocara el césped soltó una tijera al aire para mandarla dentro.

Todavía hubo tiempo para un golazo más, el de Burgui, que tras una buena jugada individual se abrió hueco ante la pasiva defensa del Rayo y en tiempo añadido soltó un latigazo lejano, muy potente para batir de nuevo a Alberto García. El resultado ha sido más abultado de lo que se ha visto en el terreno de juego, sobretodo en el tramo donde los dos equipos estaban con once. La expulsión marcó demasiado el partido aunque el Alavés fue superior. Sigue en dinámica ascendente, sumando tres jornadas sin perder y dos victorias consecutivas.