Un error de Unai Simón silencia San Mamés

Francesc Ripoll

No era el mejor partido del Athletic, pero tras un golazo de Williams parecía que los leones iban a volver a la senda de la victoria. Pero un clamoroso error del portero Unai Simón puso unas justas tablas en un encuentro donde ambos equipos dominaron en una mitad.

Salió en tromba el cuadro vasco, donde mandó hasta 4 balones al área en los primeros 10 minutos. Pero esos centros o no encontraban rematador o se culminaban con testarazos desviados. Los porteros, poco exigidos, hicieron acto de presencia, una vez en cada área. Primero Masip, que desvió un potente disparo de Raúl García. Luego fue el turno de Unai Simón, salvando un tremendo error de Yeray que dejó a Enes Ünal con todo para marcar, pero el meta se hizo grande y paró el mano a mano.

Pese a que los pucelanos se defendían con uñas y dientes, frenando el eléctrico inicio de partido de los de Garitano, nada pudieron hacer para parar a Williams. Carrerón desde el medio del campo, dos toques para irse por velocidad y potencia de Salisu, y tras zafarse de Masip, sentó a Kiko Olivas con un recorte para anotar a placer. Golazo para delirio de San Mamés.

Empezó falto de ritmo el segundo tiempo, con pocas acciones ofensivas, transiciones lentas y muchas interrupciones. Solo un tiro de Muniain inquietó a la zaga vallisoletana.

Apretó el cuadro de Sergio González, que dominaba el balón a falta de ese pase final para hacer daño. Y a falta de clarividencia en el área contraria, un error garrafal de Unai supuso al empate. Centro al área, al meta se le escapó el cuero, rebotó en Íñigo Martínez y entró en la portería. Increíble pero cierto.

Fue con todo el Athletic tras el gol, y Muniain pudo lograr la épica. Error de Kiko Olivas y tras un tres para uno, mandó un disparo a la escuadra que rechazó un Masip felino. Parada salvadora que terminó valiendo un punto.