Triunfo de la mano del 'Papu', pero preocupación por Ocampos

La felicidad no siempre es completa, o que le pregunten al Sevilla, que tuvo todos los condimentos para una noche perfecta: victoria por goleada 3-0 ante el Getafe, portería a cero, cuarta victoria seguida en liga y debut en liga con gol de Alejandro 'Papu' Gómez. Pero la nota negativa llegó antes de todo esto, cuando Lucas Ocampos abandonó el campo seriamente lesionado y a la espera de su diagnóstico.

Aprovechando la confusión entre el segundo y el tercer lugar, el Sevilla no quiso dejar pasar el tiempo para meter presión al Barça. A los 34' abrió el marcador gracias a un tanto del propio Ocampos que resultó invalidado por el VAR: Martínez Munuera interpretó que el balón había golpeado en el brazo, aunque la repetición dejaba más dudas que certezas.

Los de Nervión seguían presionando fuerte, manteniendo su incisivo estilo aún después del descanso. En-Nesyri tuvo el gol que abriría la lata, pero su remate se fue por encima. Aunque esa no era la mala noticia: sobre los 55' Djené llegó tarde a un balón y le destrozó el tobillo a Ocampos, que se retiró llorando en la camilla. La expulsión del central fue inminente, y con ella el cambio de guion.

Ya sin Ocampos, la entrada del 'Papu' Gómez y de Munir le dio otro aire al ataque andaluz. Para el ex del Barça fue llegar y besar al santo, aprovechando un envío de Jordan al área y dejando el balón en las piolas custodiadas por Rubén Yáñez. 

El argentino esperó un poco más, pero también mojó: trallazo de zurda que fue imposible para el guardameta, y victoria a la que En-Nesyri le puso números de goleada con el 3-0 sobre el final del partido. La cuarta plaza tiene un dueño que asoma amenazante para los tres de arriba.