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El CSD no tiene competencias en el partido de Miami

El Girona - Barcelona trae cola

El Girona - Barcelona trae cola / EFE

Ramón Fuentes

Maria José Rienda, Secretaria de Estado para el Deporte, quiso manifestarse este martes, con motivo de su comparecencia ante el Congreso de los Diputados, acerca del partido en Miami. La presidenta del CSD dijo literalmente que “lo mejor es que se reúnan las partes, hay funciones delegadas pero hasta que no se sienten las partes no tenemos las posturas”.

Además se expreso de los siguientes términos, respecto a la autorización que debe dar la RFEF además de darle traslado a la UEFA: “Hay un procedimiento que es esencial para que se pueda dar la resolución. Desde el CSD se vele por la seguridad de ese procedimiento”.

Pues bien desde SPORT reiteramos que el Consejo Superior de Deportes no tiene ninguna capacidad decisoria en esta situación como tampoco labor algún acerca de velar sobre el procedimiento. Como ya adelantamos hace semanas, el actual convenio de coordinación RFEF-Liga vigente hasta junio del 2019 nada dice acerca de esta opción sobre un partido en el extranjero; si bien las competencias en cuanto a los horarios los tiene delegados la Liga. Es decir para nada es equiparable al tema del calendario donde si el convenio fija que en caso de falta de acuerdo entre la Liga y RFEF sobre el mismo, como sucedió este pasado verano, el CSD tiene capacidad para decidir el calendario definitivo en Primera división. Pero no es el caso. Esta es una cuestión que deben solucionar LaLiga y la RFEF.

Porque como también os venimos contando en SPORT desde el principio, la clave radica en el Reglamento de partidos internacionales de FIFA donde se fija esta situación donde se pretende la disputa de una competición oficial fuera de su territorio. Y en el mismo queda bien claro que, una vez los dos clubes autorizan el mismo, deben trasladarla la petición a la RFEF. Situación en la que nos encontramos actualmente. Y ahora la “patata caliente” la tiene la RFEF quien debe autorizar este partido además de dar traslado de esta petición a la UEFA. Tiene hasta el 5 de enero del 2019, veintiún días antes de la disputa del encuentro entre Girona y Barcelona, para poder hacerlo.

Ahora la clave está en saber que paso dará la RFEF. En caso de ser favorable y remitirlo a UEFA, y en caso de que esta última diera también el visto bueno, se dará traslado a la Federación de Estados Unidos además de la propia CONCACAF. Procedimiento donde la FIFA debe estar informada pero carece de capacidad decisoria. Es decir que, pese a las manifestaciones contrarias emitidas por Gianni Infantino, no deja de ser su punto de vista pero no se refleja inicialmente en ninguna privación.

Así pues la situación es la siguiente: ahora es la RFEF quien desde el lunes de la semana pasada tiene encima de la mesa la petición formal de los dos clubes además de la Liga para la disputa del partido. Y debe ser el ente federativo quien de el siguiente paso. Sea cual sea, el CSD carece de capacidad alguna para modificarlo o condicionarlo, más allá de una labor disuasoria. Veremos pues como continúa el procedimiento. Sobra decir que tampoco el gobierno tiene capacidad alguna de decisión, más allá de expresar su punto de vista. Algo que de momento oficialmente nadie ha hecho desde la presidencia del gobierno. Y tampoco consta oposición alguna en la propia patronal del fútbol español.