El Celta huele los puestos europeos

Aspas, con gol y asistencia, volvió a liderar un nuevo triunfo de los de Coudet, que siguen su espectacular escalada

El Huesca fue un más que digno rival, pero le faltó pegada en la primera mitad y tiempo en la segunda para culminar la remontada

El Celta cierra el 2020 con una sufrida victoria ante el Huesca

Albert Gracia

El Celta sigue a lo suyo y ya se asoma por los puestos nobles de la tabla. Le bastó con la pegada arriba de los Aspas, Nolito y compañía para noquear a un Huesca que sumó nuevamente más sensaciones que puntos. Los altoaragoneses espabilaron en el tramo final y acecharon la meta de Rubén Blanco. Demasiado tarde.

Celta-Huesca

Liga Santander

2
1
Alineaciones
Celta
Rubén Blanco; Mallo, Araujo, Murillo, Olaza (Aidoo, 90'); Tapia (Fontán, 83'); Brais, Denis Suárez (Yokuslu, 73'), Nolito (Baeza, 83'); Aspas (Beltrán, 73') y Santi Mina.
Huesca
Fernández; Pedro López (Juan Carlos, 80'), Pulido, Siovas, Javi Galán; Mosquera, Mikel Rico (Seoane, 67'), Borja García (Rafa Mir, 56'); Ferreiro, Okazaki y Ontiveros (Sergio Gómez, 68').

Le faltó toda la profundidad del mundo al Huesca en la primera hora de partido, donde no supo traducir su académica y limpia salida de balón en ocasiones. No se impacientó el Celta, que está a otra cosa con Coudet. Supo darle el protagonismo al rival en algunas fases para hacer daño tras pérdida. Tremendo en la presión. En transiciones, los celtiñas tuvieron las mejores ocasiones antes del descanso. Nolito las protagonizó casi todas. Muy claro el remate de cabeza a centro de Olaza.

También buscó dominar el cuadro de Coudet, pero la diferencia en el partido iba a ser la pegada. Mientras a los altoaragoneses se les cerraba la persiana en campo rival, el Celta no hacía prisioneros. Vio que el rival sufría tras pérdida y apretó los dientes para abrir la lata. Robó Denis arriba, Aspas asistió y Nolito, que había errado dos, no falló en la tercera.

En la reanudación, mucho más dominio celtiña, ante un Huesca incapaz de controlar el partido. El Celta subió el ritmo, con un Denis en estado de gracia. Pero de nuevo volvía a hacer daño aprovechando los errores rivales. Robó en el centro del campo y Nolito que la puso al espacio para que Aspas no fallara. Otra vez la presión. Luego llegó el carrusel de cambios, que despistó la hoja de ruta de los de Coudet.

El Huesca se vino arriba espoleado por un Seoane que tuvo hasta dos ocasiones muy claras para reducir diferencias. También la tuvo Nolito. Sin Aspas, el Celta fue reculando y los de Michel aprovecharon para meterse de lleno en el partido. No falló Seoane. Los altoaragoneses murieron en el área celtiña y Rubén Blanco tuvo que sacar una buena mano al libre directo de Sergio Gómez, que revolucionó el duelo. Al final, los tres puntos se quedaron en casa.