Un golazo de Munir alivia al Glorioso y hunde más al Dépor

César Ger

Tres puntos de oro para el Deportivo Alavés del Pitu Abelardo, que se impuso a un rival directo como el Deportivo gracias a un trallazo de Munir por la escuadra cuando se cumplía la hora de partido. Fue muy superior el cuadro vitoriano al once de Seedorf, ramplón y plano en su propuesta. Mientras los vascos van como un tiro hacia la salvación, el Dépor está en la UVI y con muy malas sensaciones. 

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Liga Santander

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Alineaciones
Alavés
Pacheco; Martín, Laguardia, Rodrigo Ely, Duarte; Ibai (Hernán Pérez, 81'), Manu García, Tomás Pina, Pedraza; Munir (Medrán, 87'), Guidetti (Rubén Sobrino, 72').
Deportivo
Rubén; Juanfran, Albentosa, Bóveda (Celso Borges, 81'), Luisinho; Krohn-Dehli (Mosquera, 64'), Guilherme; Lucas Pérez, Adrián, Bakkali (Fede Cartabia, 74'); Andone.

El Alavés salió con mucha fuerza, metiendo al Dépor en su parcela y creando varias ocasiones, la más clara un remate a bocajarro de Rubén Duarte que se estrelló en la cruceta a los cinco minutos. Instantes después, Guidetti culminaba una buena penetración por la izquierda con un disparo raso que salía fuera por poco. Y en pleno acoso babazorro, contra perfecta de los gallegos al cuarto de hora llevada por Adrián con chut de Bakkali al poste. 

Tras esta acción se enfrió un tanto el encuentro. Los locales llevaban el peso del juego en la medular, pero con un fútbol lento y previsible que facilitó la tarea a la defensa coruñesa. Apenas sustos aislados, como un tiro de falta de Ibai Gómez contra la barrera o un disparo de Pedraza que se perdía fuera por poco, llegándose al intermedio con el cero a cero inicial.

Tras al asueto, seguía creando más peligro el Alavés, pero sin que el partido terminara de despegar. Un cabezazo de Manu García y un disparo lejano de Munir, ambos a las manos de Rubén, eran los primeros avisos del 'Glorioso', que acabaría adelantándose justo a la hora de encuentro, cuando Munir El-Haddadi recogió en la frontal, buscó hueco y puzo un zurdazo por alto perfecto, golazo a la escuadra y felicidad albiazul. 

Apenas dio señales de vida el cuadro de Seedorf. En cambio, Ibai a los 77 minutos estuvo a punto de conseguir un golazo, pero su disparo desde 25 metros fue al palo, muy cerca de la cruceta. Pudo caer el segundo tanto vitoriano en las contras, pero al final el uno a cero y la felicidad en Mendizorroza fueron inamovibles.