Alegre, Oliva, Quemada y Cortés se despiden con orgullo de la selección

Los pilares de los últimos JJOO analizan lo que ha sido su última participación a título personal

Felices por todo lo conseguido pero con la espina de no haber podido superar a la mejor selección del mundo

Despedida de los #Redsticks

Despedida de los #Redsticks / RFEH

EFE

Los internacionales David Alegre, Roc Oliva, Pau Quemada y Quico Cortés, que este domingo jugaron su último partido con la selección española, se mostraron orgullosos de la actitud del equipo ante Bélgica, a pesar de la derrota (3-1) que les deja fuera de las semifinales de Tokio.

- David Alegre

"Queríamos competir y luchar contra la actual número uno. Hemos jugado de tú a tú, con opciones, hemos luchado cada bola y se ha visto el carácter, pero hemos tenido delante a la campeona del mundo y por pequeños detalles se nos ha escapado". Después de vivir en Tokio sus quintos Juegos Olímpicos, habló del "final de una generación", en la que algunos llevan "casi 20 años en la élite y son amigos".

"Te vienen recuerdos muy bonitos. Cada torneo, cada partido siempre te llevas un pedacito. Recuerdas más los primeros Juegos, la medalla de plata y estos últimos en los que no se nos puede reprochar nada. Espero que la gente se sienta orgullosa de nosotros. El futuro siempre es bueno, es hora de que nosotros demos un paso al lado y cojan experiencia las nuevas generaciones".

- Roc Oliva

"Es una sensación extraña, es el último partido de mi carrera y no quería que fuera este, pero estoy contento. Hemos sentido a toda la gente que estaba detrás de nosotros, ha sido un auténtico placer. Esperamos haber podido estar a la altura y si no lo hemos hecho pedir disculpas. Lo hemos hecho lo mejor que hemos podido".

Oliva, que igual que otros compañeros ha retrasado su retirada para llegar a estos Juegos después de haber sido parte del equipo que ganó la plata en Pekín 2008 junto a David Alegre y Quico Cortés, se mostró "feliz" por todo lo que le ha dado el hockey. "Los equipos españoles tienen un carácter diferente, Bélgica es el que está jugando mejor en los últimos años, pero no tenemos miedo a nada, no se trata solo de hockey, también de confianza de competir. Hoy por pequeños detalles hemos podido ganar. Soyez nos ha dicho que siente que no nos haya podido llevar más lejos. Nos hemos quedado en los cuartos de los juegos con las sensación de que podíamos más".

- Quico Cortés

"Por minutos lo he visto muy bien. Estábamos donde queríamos, hemos fallado en el último penalti de Bélgica y hemos tenido la ocasión a dos minutos, pero si el 3-1 no entra el partido se acaba 2-2 y habríamos ido a los shoot-out. No hemos cumplido el objetivo que habíamos marcado de llegar a semifinales, pero la campeona del mundo ha ganado la batalla en las áreas con su acierto, no con nuestros fallos".

Convertido en el jugador con más internacionalidades, después de defender la portería de España en 323 partidos, Cortés deja la selección pero no el hockey porque seguirá trabajando para el Egara en la preparación de los porteros. "El Egara es mi casa. No me puedo separar del hockey. Hoy me he presionado a mi mismo para estar metido a minuto a minuto y lo he cumplido... no creo haber encajado ningún gol por no estar concentrado. Estaba convencido de que no era mi último partido. Me quedo con los amigos y el recuerdo de los jóvenes ya lo tendré porque nos van a dar muchas alegrías".

- Pau Quemada

"Ha sido un partidazo, hemos disfrutado todos, hemos puesto en un aprieto al número uno del mundo y hemos llegado al último cuarto con un gol de diferencia. Nos hemos vaciado en el campo, pero no ha podido ser. Triste porque no me gustaría estar haciendo estas declaraciones, pero son los que son y dejamos paso a una nueva etapa".

Nacido en La Rioja y residente en Terrassa desde niño, donde su abuelo que había jugado al hockey le introdujo en el deporte, Quemada admitió que no poder luchar por la medalla en Tokio es "un sueño incumplido", aunque no cambia nada de cómo ha sido su carrera culminada con el abrazo del equipo y el "cocktail de emociones" que ha supuesto. "El hockey sido una lección de vida, he disfrutado, a diferencia de Quico, Roc o David que son la entrega espectacular, yo he entrado y salido de la selección varias veces por motivos personales, pero he tenido la suerte del día de poder volver y ahora me toca hacer otras cosas. No cambio para nada lo que he hecho hasta hoy, ha valido la pena cada minuto y cada amigo, cada gol a favor o en contra y los momentos fuera del hockey. El viaje ha sido brutal".