¡Van Niekerk pulverizó el récord de Michael Johnson en 400 lisos!

La final de 400 metros lisos masculina se presentaba tan interesante como la posterior del hectómetro. Mientras Wayde Van Niekerk se concentraba, el granadino Kirani James defendía el título logrado hace cuatro años en Londres ante un LaShawn Merrritt que se era el único candidato a devolver a Estados Unidos al podio, país que quedó fuera de las medallas en la pasada edición tras coparlas en Atenas 2004 y en Pekín 2008.

Las semifinales ya mostraron el excelente momento en el que han llegado los primeros espadas de la vuelta a la pista. James logró el mejor tiempo con 44.02, seguido de Merritt con 44.21, del triniteño Michel Cedenio (44.39) y de otro granadino (de la isla caribeña) con 44.44. Además, había que estar muy pendientes del sudafricano Wayde Van Niekerk, actual campeón mundial que acreditó 44.45.

Y lo que acabamos de vivir en el Engenhao es de esas proezas que no se olvidan. Incredulidad, múltiples periodistas y aficionados llevándose las manos a la cabeza, gritos, ovaciones...

¡Van Niekerk destrozó el récord mundial de Michael Johnson (43.18, Sevilla 1999).

El sudafricano salió como una exhalación por la calle 8, con Merrit tratando de mantener las distancias y James algo más lento. El estadounidense y el granadino se marcaban a la espera de que Van Niekerk desfalleciera en la recta final, pero no lo hizo y mantuvo su colosal ritmo hasta cruzar la meta.

Fue alucinante. ¡43.03 en 400 metros! Rozando lo imposible. Por detrás del actual campeón olímpico, campeón mundial y recordman universal llegó Kirani James (43.76) y Merritt (43.85).

El sudafricano no sabía qué hacer. Incluso Usain Bolt se sorprendió en la cámara de salidas de la final de 100 metros. ¡Qué suerte haber vivido esta proeza 17 años después de ver en directo el récord de Michael Johnson! Me siento tan afortunado...