Pronunciamiento inédito

La Corte Interamericana condena al Estado colombiano por el exterminio de un grupo de izquierda

Para el tribunal, Colombia es responsable por las violaciones de derechos humanos perpetradas contra unos 6.000 integrantes de la Unión Patriótica

Simpatizantes del partido Unión Patriótica.

Simpatizantes del partido Unión Patriótica. / EFE/ MAURICIO DUENAS CASTANEDA

Abel Gilbert

La historia de la violencia política en

Colombia

acaba de cerrar un capítulo lacerante. La Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) ha declarado responsable al Estado de ese país por el "exterminio" de la formación de izquierdas Unión Patriótica (UP) y sus militantes. La declaración del organismo dependiente de la Organización de Estados Americanos (OEA) es contundente e histórica: "Colombia es responsable por las violaciones de derechos humanos cometidas en perjuicio de más de 6.000 integrantes y militantes del partido Unión Patriótica a partir de 1984 y por más de 20 años como consecuencia de un plan de exterminio dirigido contra el partido y sus integrantes".

El organismo hizo referencia en su dictamen al reconocimiento de responsabilidad internacional por violaciones a la integridad personal, la vida y la libertad; la falta de una verdad estatal frente a los delitos perpetrados y la violación a los derechos de los niños y las niñas durante dos décadas de espanto. En virtud de este pronunciamiento, el Estado deberá hacerse cargo de la reparación a las víctimas. A su vez debe abrirse en un plazo de no más de dos años las investigaciones que deban llevar a que se determinen las responsabilidades penales correspondientes de los autores de esos episodios. Le toca también al Estado llevar adelante una búsqueda de las personas desaparecidas, hacerse cargo de la situación médica y psicológica de las víctimas y sus familiares y, además, preservar la memoria de aquellos que fueron

asesinados

.

La posición de Petro

Las conclusiones de la CIDH llegaron después de casi 30 años y en un contexto político diferente al momento en que se realizaron las presentaciones judiciales. De hecho, el presidente Gustavo Petro, el primero de izquierdas en la historia colombiana, expresó su disposición a cumplir el fallo y apoyar la lucha contra "la impunidad".

 "Un tribunal de justicia de carácter americano dirá que el Estado ayudó a asesinar a miles de militantes de un partido político, solo porque era de izquierda. Un Estado asesino que no debe retornar más, una sociedad de privilegios que asesina antes que permitir el cambio", dijo el presidente. Petro precisó sin embargo que la justicia internacional debió intervenir porque los Estados no eran "capaces de juzgar los peores delitos: los crímenes contra la humanidad". 

El mandatario reivindicó en ese sentido su proyecto de “paz total” que no solo involucra a las guerrillas que no han abandonado las armas sino a los grupos armados de ultraderecha. “Aún la mano está tendida. Pero no piensen que este Gobierno se arrodilla”, advirtió.

Repercusiones

La Unión Patriótica tuvo en su momento una fuerza considerable, menguada por la violencia especialmente paramilitar. En la actualidad, forma parte de la coalición del Pacto Histórico que llevó a Petro a la presidencia.

El senador del partido del Polo Democrático, Iván Cepeda, hijo de una de un exdirigente de la UP consideró que la decisión de la CIDH "hace justicia a tres décadas de lucha de las víctimas". Se trata de "un precedente para que en el futuro en Colombia no se vuelva a repetir un genocidio político".

De acuerdo con Radio Caracol de Bogotá, más de 300 víctimas se reunieron en el Centro de Memoria capitalino para celebrar el dictamen. "El reconocimiento de la Corte es definitivo para tener un cierre en este proceso, esto servirá de base, de fuerza, de jurisprudencia para todas las masacres que se llevan a cabo aún en el país:" dijo María Eugenia de Antequera, en nombre de hombres y mujeres que conocieron el horror.