El Manchester United se lame las heridas a costa del Leicester (4-1)

El Manchester United olvidó a base de goles la mala racha que arrastraban desde la derrota en derbi. Los de Mourinho lo hicieron de forma práctica, poco brillante y contundente. Mucha culpa la tuvo el Leicester, un conjunto muy alejado del que ganó la pasada Premier, que encajó tres de los cuatro goles a balón parado, en tres córners. A pesar de esto, los focos miraron al banquillo para enfocar al capitán del equipo. Mourinho sentó al cuestionado Rooney, y el resultado final no juega a favor de un capitán que queda señalado.

El técnico portugués optó por remover el once inicial a la busca de una respuesta. Entraron hasta cuatro hombres que no participaron de inicio en el derbi de Manchester, y el gran damnificado fue Wayne Rooney. Los cambios, sin embargo, no aplicaron un efecto inmediato en el equipo. De hecho fueron los visitantes los que parecían tener sus conceptos más definidos en los primeros compases.

Dos líneas de cuatro con Slimani y Vardy arriba para buscar opciones a la contra. El Leicester se sabe de memoria el plan de Ranieri, y gozó de sus mejores minutos en el tramo inicial. El Manchester United seguía lleno de dudas, y sin encontrar mecanismos útiles en la creación de juego, pero la balanza se decantó de una forma poca previsible. Porque una de las principales virtudes de su rival, el balón parado, se convirtió en su debilidad. A los 20 minutos de juego, Smalling se zafó con facilidad del marcaje de Huth y Fuchs (1-0) para rematar a gol un saque de esquina. El estallido de Old Trafford liberó a los locales, y los de Ranieri desaparecieron.

El crecimiento 'red devil' vino propiciado por una mejora de sus individualidades. Pogba se movió con libertad y empezó a generar peligro a base de fogonazos. Mata se liberó cerca del área, y Rashford estaba obcecado en generar peligro a la defensa rival.

En una combinación de los mediapuntas locales, Lingard cedió el balón a Mata, que batió al meta Zieler con un tiro ajustado al palo desde la frontal (2-0). El segundo tanto terminó de sacar del encuentro al Leicester, que se entregó totalmente antes del descanso. Los dos siguientes córneres que tiró el Manchesyer United, acabaron en gol. El primero fue sacado en corto, Mata centró raso y Rashford empujó a placer a puerta vacía (3-0), en un colosal fallo colectivo de la defensa visitante. Antes del intermedio, llegó el turno de Pogba (4-0). El francés se anticipó en el primer palo y peinó la pelota para mandarla a la red.

Los locales no jugaron de forma brillante, pero les fue imposible no aprovechar tanta concesión rival. Con el contundente marcador al descanso, Ranieri se olvidó del partido e hizo descansar a Vardy y Mahrez. Los ‘foxes’, sin embargo, mostraron algo de orgullo. El 4-1 del honor fue obra de Gray, que se sacó un latigazo espectacular desde el vértice derecho del área de De Gea para mandarlo a la escuadra, y maquillar el marcador.

Los de Manchester se dedicaron a vivir con la tranquilidad del trabajo hecho, y Mou dio minutos a Carrick y Rooney, coreados por la grada. Se tendrá que ver como evoluciona el vínculo entre el capitán y Mourinho. El United no maravilla, pero gana que, vistos sus últimos precedentes, no es poco.

ASÍ QUEDA LA CLASIFICACIÓN DE LA PREMIER LEAGUE