MANCHESTER UNITED

Mourinho: el enemigo en casa

Los futbolistas del Manchester United han recibido con disgusto y estupor las críticas públicas de un Mourinho cada vez más alejado de su vestuario

Mourinho ya señala a sus jugadores... Y el vestuario del United empieza a hartarse

Mourinho ya señala a sus jugadores... Y el vestuario del United empieza a hartarse / sport

Brian Owen

José Mourinho ha levantado una barrera invisible con sus jugadores, después de su crítica pública por la derrota en Vicarage Road que ha hecho entender al vestuario que tiene el enemigo en casa.

Han transcurrido doce años desde que el entrenador portugués expulsó de mala manera a Adrian Mutu del Chelsea y su relación con los futbolistas mantiene los mismos parámetros que en sus inicios.

Si llegó a Old Trafford advirtiendo que no quería ni ver a Schweinsteiger y no le tembló el pulso a la hora de desterrar a casi todos los canteranos apadrinados por Van Gaal, apenas un mes después de comenzar la temporada ha trasladado su régimen de terror al vestuario, exponiendo ante la opinión pública a varios de sus jugadores.

MkhitaryanLingardBlindShawJones... ¡Rooney!... La lista de señalados por Mourinho aumenta exponencialmente a medida que transcurren las semanas y los resultados descubren sus deficiencias. Si los árbitros son un objetivo fácil, el vestuario es la otra diana preferida por el técnico cuando el marcador no acompaña.

"Ferguson jamás habría actuado así" explicó una persona próxima al United, exponiendo que el durísimo carácter del escocés en el interior del vestuario nunca motivó que criticase a sus hombres fuera del mismo, una diferencia absoluta con la actuación de Mou.

"Beckham apareció un día con una brecha en la ceja pero nadie escuchó a Ferguson hablar mal de él ante los periodistas" refrescó esta misma persona, recordando aquel episodio, cuando el ex entrenador lanzó una bota a la cabeza del jugador.

"El final de Keane tampoco fue muy feliz en el club... Pero Fergie no le señaló ante los medios, como tampoco hizo con Stam, cuando de un día para otro forzó su traspaso. Ni una mala palabra" convino, refrescando capítulos turbios, que los hubo, en el pasado pero que "nunca" provocaron que el retirado entrenador escocés expusiera ante los medios a los suyos.

El presente apunta a Luke Shaw de la misma forma que ya se ha filtrado el interés de Mourinho en forzar la salida de Phil Jones durante el mercado de invierno después de no darle ni una oportunidad.

Pero la tormenta que se avecina puede tener consecuencias impredecibles, por cuanto es nada más y nada menos que Wayne Rooney quien se afirma está en la diana del entrenador portugués.

Lo que le espera, o se afirma, a Rooney no sería muy distinto de lo que que le ha ocurrido a Daley Blind, condenado por su error en el derbi frente al Manchester City por más que Mourinho le forzase a jugar en una posición a la que no se acostumbra. O que también ocurrió con Lingard (el canterano señalado).

Y... ¿Qué pasa con Carrick? El veterano centrocampista rechazó una oferta para volver al West Ham y no escuchó ni los cantos de sirena del Arsenal porque Mou le ofreció renovar. Jugó la Community Shield en agosto y desapareció del escenario. No ha vuelto a jugar y se sospecha que su fuerte carácter en el vestuario ha motivado que el entrenador le aparte.

Con todos estos casos, con todos los precedentes y las sospechas que crecen alrededor de Old Trafford, no es extraño que el nombre de Casillas se repita, refrescando su agrio divorcio con Mourinho en Madrid, ni que salgan a la palestra todos los que sufrieron la ira del portugués.