Tiger: "Lograr mi victoria 80 en el Tour es una sensación especial"

Tiger celebra la victoria en el tee del 18 tras imponerse en el Tour Championship

Tiger celebra la victoria en el tee del 18 tras imponerse en el Tour Championship / AFP

Ramon Palomar

Ramon Palomar

Tiger Woods está definitivamente de vuelta. El ex número uno volvió a saborear una victoria en el PGA Tour, y nada menos en el torneo final de las FedEx Series, el Tour Championship, en East Lake (Atlanta), en un torneo que dominó casi de principio a fin, y que confirmó su regreso a la élite después de tanta incertidumbre con su espalda que estuvo a punto de poner punto y final a su exitosa carrera.

Pero el Tigre, lejos de entregarse, trabajó duro en los últimos 17 meses para regresar a la élite y consumó su primer triunfo del año en el torneo final, donde se decidía la FedEx Series, que finalmente fueron para el inglés Justin Rose. Woods se quedó muy cerca de hacer doblete, ante miles de aficionados que le jalearon cada golpe, hasta el triunfo final.

Su título 80 en el PGA Tour, tuvo un significado especial para él, para los aficionados al golf y para el circuito profesional, que recupera al Woods dominador que en su momento lideró tiránicamente el circuito. Hasta sus rivales y jóvenes estrellas  que lo tenían como ídolo, pudieron acercarse y felicitarlo.

Emociones fuertes

“Fue muy emocionante mi último golpe, cuando vi tanta gente a mi alrededor jaleando mi nombre”, dijo. “Alcanzar las 80 victorias es algo muy grande. Me clavé en las 79 en los últimos cinco años y llegar al 80 es una sensación especial”.

Tiger jugó como un reloj suizo especialmente en la jornada del sábado, que le permitió abrir una brecha importante en la jornada final del domingo, aunque aún tuvo que sudar hasta el final, cuando la victoria estaba cerca, pero no asegurada. Seguramente los nervios iban por dentro por lo que significaba su victoria 80. "Todo el mundo lo daba por hecho menos yo", aseguró.

Su primer triunfo después de 1.874 días no solo confirma su vuelta a la élite sino que además se acerca de nuevo al número uno mundial. De momento, ya se ha metido en el decimotercer puesto después de haber jugado esta temporada 18 torneos, con siete de ellos, entre los 10 mejores. Su próximo reto es alcanzar las 82 victorias que logró un mito como Sam Snead.

Lesiones y operaciones

Woods, de 42 años, apenas pudo jugar torneos en los dos últimos años con sus problemas en la espalda que le llevaron a sufrir nada menos que cuatro intervenciones quirúrgicas. Cuando regresó al Tour en el Farmers Insurance Open, ocupaba entonces el puesto 656 en el ranking mundial, sin opciones de estar en la Ryder y muy lejos de ser competitivo.

Solo unos meses después, ya está arriba, con victoria en el Tour y ahora excitado por su participación este próximo fin de semana en la Ryder Cup donde fromará parte del equipom estadounidense, en su lucha ante Europa, en Le Golf National, en París.

“Aprecio especialmente esta victoria porque no sabía si podría volver a jugar al máximo nivel y ni mucho menos mantener este juego en la próxima década”, comentó el estadounidense, que ya se ha convertido en el principal favorito en la próxima edición del Masters en todas las casas de apuestas.

Aunque, de momento,aparca las celebraciones y este lunes ya viajó a París con el resto de la delegación norteamericana, donde, sin duda, será una de las grandes atracciones de la Ryder Cup, en otro emocionante reto que se le plantea este fin de semana en suelo francés.