El PGA Tour amenaza a sus estrellas en caso de irse a la Super Golf League

Al igual que sucede con la SuperLiga de fútbol que ha abortado momentáneamente la UEFA con sanciones ejemplares a los ‘amotinados’, el golf también vive una situación parecida, aunque oficialmente, aún no se ha llevado a cabo.

Ante los rumores de la creación de la Super Golf League, el PGA Tour, el circuito mundial más importante, ya lanzó un mensaje para navegantes, a través del comisionado, Jay Mohanan, de que los que se sientan tentados a participar en ese nuevo circuito millonario, serán suspendidos inmediatamente e incluso, expulsados del Tour.

Y es que la nueva Super Golf League, que contará con un apoyo financiero de Arabia Saudí, quiere montar una competición por equipos formados por varios golfistas y organizar un calendario internacional.

Sondean a varios jugadores

El diario The Telegraph Sport, apuntaba que ya habían sido sondeados varios jugadores con contratos totalmente cerrados y con cifras realmente tentadoras. Se comenta que jugadores como Phil Mickelson, Justin Rose, Brooks Koepka o el mismo número uno del mundo, Dustin Johnson, ya tienen oferttas que podrían rondar los 30 millones de dólares fijos.

Ante tanta rumorología, el comisionado, Jay Mohanan quiso cortar las alas al proyecto, anunciando a los propios jugadores en una reunión en Quail Hollow, donde se disputó esta semana el Wells Fargo Championship, que será implacable quién contemple la posibilidad de irse a este proyecto millonario.

La intención de este nuevo circuito es ponerse en marcha en septiembre de 2022, y con el gancho de contar con los mejores jugadores del mundo, lo que garantizaría grandes contratos de publicidad y televisivos, al estilo que pretendía la SuperLiga de fútbol europea.

Viendo que con solo amenazas no es suficiente, el PGA Tour quiere poner en marcha una iniciativa denominada Programa de Impacto al Jugador, por el que premiará a los jugadores que causen más impacto en el circuito a nivel mediático y lo hagan crecer, con un bonus conjunto de 40 millones de dólares.  Una especie de compensación ante la posible 'fuga' de sus estrellas.