Los play-offs de Francisco

La ambición y el carácter ganador que transmite Francisco son dos virtudes que han llegado no solo al vestuario del Girona sino también a la afición. Con más de 300 partidos como profesional, el técnico ha vivido de todo. El almeriense siempre recuerda que de todo lo que le ha pasado, ha mirado de extraer la parte positiva y aprender. También del varapalo del año pasado con el Elche. No fue la primera experiencia fallida de Francisco en una promoción para subir, pero sí la primera como entrenador. 

Antes, como jugador había perdido una con el Poli Almería (1998-99). Las otras dos promociones que ha disputado Francisco acabaron con alegrías: ascenso a Segunda A con el Poli Ejido (00-01) y con el Almería (01-02). La primera toma de contacto de Francisco con una promoción de ascenso no fue satisfactoria. Con 20 años arecién cumplidos, la temporada 98-99, Francisco (10 goles) lideraba el ataque del Poli Almería. El equipo se jugó el ascenso en el antiguo formato de liguilla contra el Madrid B, Bermeo y el Levante con premio para los valencianos.

Varapalo en Girona

A partir de aquí y hasta el año pasado, Francisco solo había experimentado alegrías en las fases de ascenso. La primera fue en 2001 cuando celebró el ascenso a Segunda A con el Poli Ejido imponiéndose a la liguilla al Calahorra, Espanyol B y Atlético B. El curso siguiente en el Almería, Francisco hizo el gol decisivo en Pontevedra. Aquel día Francisco salió a hombros de sus compañeros y de la afición. Una imagen que, con la boca pequeña, espera que se repita de aquí dos domingos en Montilivi.