Saltar al contenido principalSaltar al pie de página

GIRONA

Ounahi, un fichaje de rendimiento inmediato

El centrocampista marroquí se estrenó como goleador y realizó una exhibición de entrega

El centrocampista marroquí­ del Girona Azzedine Ounahi celebra tras anotar el primer gol del encuentro durante el partido de la jornada 6 de LaLiga EA Sports entre el Athletic Club y el Girona, este martes en el estadio de San Mamés en Bilbao.

El centrocampista marroquí­ del Girona Azzedine Ounahi celebra tras anotar el primer gol del encuentro durante el partido de la jornada 6 de LaLiga EA Sports entre el Athletic Club y el Girona, este martes en el estadio de San Mamés en Bilbao. / EFE

Jordi Bofill

Girona

No le quedó nada por dar. Pero nada. El marroquí Azzedine Ounahi salió de San Mamés fundido, al igual que lo dio todo en Vigo y el sábado contra el Levante. Ounahi es el fichaje que mejores sensaciones transmite, demostrando ser un refuerzo de rendimiento inmediato. En los minutos que acumula, ha quedado claro que será uno de los jugadores más importantes de este nuevo Girona.

Porque si enamoró a Luis Enrique, será por algo. Es verdad que hace tiempo de ese invierno del 2022, y que desde entonces su juego ha sido más bien discreto. Pero en estas jornadas como nuevo centrocampista gerundense parece que se está empezando a reencontrar con una gran versión de sí mismo. Todavía es pronto, pero los cimientos están ahí.

Y eso que el centro del campo del Girona está dañado de arriba abajo. Sin Witsel, Míchel apostó por Solís. Iván Martín continuó en el once, pero sobre todo estaba Ounahi, que no es Yangel Herrera ni hace de Yangel Herrera.

Al marroquí se le vio despierto en la presión a la salida de balón rival, y especialmente acertado cuando ésta pasaba por sus pies. No tardó ni diez minutos en marcar el tercer gol de la Liga para el Girona, aprovechando una jugada estratosférica de Bryan Gil. Dio un latigazo que impactó en el larguero y se fue hacia dentro, sin que Unai Simón pudiera hacer nada.

Cuando el escenario pedía más personalidad, ahí estaba Ounahi luciéndola. La pelota no le quemó, generando diferentes oportunidades que no fueron gol por poco. Tampoco, y eso es lo más importante, le cayeron los anillos para correr campo atrás y echar una mano a sus compañeros cuando el equipo no lo pasaba bien, ahogado por un Athletic muy intenso, especialmente en la segunda parte.

Una falta por ahí, una recuperación por allá y una salida para ganar metros como elemento adicional. Todo ocurría por Ounahi, en San Mamés. Incluso el marroquí vio una tarjeta amarilla. No tiene ninguna manía, el nuevo soldado de Míchel, que después de un tiempo parado y no realizar la pretemporada con el Girona ha sido titular cada vez. Una carga significativa de minutos que será necesario gestionar para no tener sustos en un futuro.

Para el Girona es una bendición contar con la presencia de un futbolista que no negocia el esfuerzo. Cuando Míchel cambió a Solís, Arnau Martínez pasó a la posición de pívote. Aún habría un último retoque, cuando se jugó el tramo final, con todo abierto, con el joven Lass, que debutó en partido oficial.

Actores secundarios de Ounahi, que seguía corriendo, intentando que Vanat enganchara alguno de los contragolpes que intentaba teledirigirle. Si nada se tuerce, el Girona habrá acertado de lleno con Ounahi, que vivió su primera gran noche en Bilbao.

TEMAS