La juventud llama a la puerta

El Girona continúa latiendo y, a pesar de todas los problemas que ha sufrido este inicio de curso, ha sabido levantarse y acercarse a los lugares altos de la clasificación. Parte de la culpa de la reacción del Girona estos primeros meses de Ligaha sido la participación de los jugadores de la base.

Las necesidades, provocadas por un alud de bajas, ha hecho que Francisco haya utilizado ya 9 jugadores de la base (Kebé, Terrats, Pau Víctor, Turmo, Pachón, Monjonell, Jandro, Arnau y Gonpi) durante esta primera vuelta infernal de partidos. El filial en Tercera o la Residencia de les Hortes a pleno rendimiento son indicadores que la salud del fútbol formativo del clubes de hierro. La juventud llama fuerte la puerta y, en tiempo de economía de guerra la mezcla de hambre y calidad de los jóvenes, siempre es bienvenida.

Han quedado atrás los años en que un jugador del juvenil o del filial debutaba aisladamente con el primer equipo. Uno de los jóvenes que más minutos ha tenido hasta ahora es Ramon Terrats. El barcelonés debutó en Zaragoza y acumula 171 minutos en cuatro partidos, además de 8 convocatorias, entre Liga y Copa. "El debut llegó más pronto del que me pensaba, pero estoy muy orgulloso", explica Terrats. El jugador revela que el vestuario del primer equipo lo ha recibido "muy bien". "Nunca había estado con gente profesional, pero son personas normales, muy próximos. Aday, que puerta tanto e tiempo al club, me ayudó mucho", comenta.

En la misma línea, se expresa Pau Víctor. El de Sant Cugat ha tenido ya siete oportunidades este año después de debutar en la última jornada del curso pasado. "No me esperaba tener tanto de protagonismo. He sido mucho en dinámica con ellos y soy consciente que de trabajar mucho para tener es oportunidades", dice.