Girona: Una portería sin candado

Girona: Una portería sin candado

El equipo de Eusebio, con problemás para 'blindar' la portería / GIRONA

¿Qué le pasa al Girona? Parece inexplicable la transformación que ha sufrido el equipo. Sin apenas cambios en la plantilla, aquel tercer mejor debutante en Primera de la historia de la temporada pasada, el mismo que empezó con buen pie su segunda andadura en Primera, hace aguas desde hace un tiempo.

El 3-0 de Eibar confirmó que los de Eusebio caen en picado. La racha es preocupante. Tanto, que el descenso ha pasado de estar diez puntos por debajo a tocarse con la punta de los dedos. ¿Y por qué? Muchos son los factores que lo explican. Las dinámicas juegan siempre un papel importante y más para una plantilla corta y mermada por las lesiones que ha llegado más lejos que nunca en la Copa del Rey.

Pero eso no es todo. El Girona encaja muchos goles. Demasiados. Y esto, en cualquier categoría pero sobre todo en Primera, es un verdadero suicido. Su portería ha olvidado el candado y ya no cierra con llave. Arreglarlo será el primer paso para intentar remontar el vuelo antes de que sea demasiado tarde. Son muchas ya las jornadas sin ganar.

La última victoria en Primera llegaba a finales de noviembre (1-3 en el RCDE Stadium) y la dinámica, además de nefasta, es preocupante: 4 puntos de los últimos 27 en juego. En partido oficial, a principios de diciembre en la Copa se ganó por última vez (2-1 al Alavés). Son, en total, 12 encuentros sin conocer la victoria entre ambas competiciones. A todo ello, un dato todavía más doloroso. Desde el 10 de noviembre que no se deja la portería a cero.

Fue en un 0-0 contra el Leganés. Curiosamente, después de ganar en Mestalla (0-1), también sin encajar. Son 15 los partidos en los que se ha recibido, por lo menos, un gol. La cifra asciende hasta los 29 tantos en contra durante este periodo. Lo que significa que el portero de turno recibe una media de casi dos goles por encuentro. Así es muy difícil puntuar. Bounou ha encajado 16, mientras que a Iraizoz le han marcado 13. Justo en aquel 0-0 con el Leganés, se puede decir que el Girona vivía el mejor momento del curso. Ganó al Espanyol (1-3), salvó un valioso empate con el Atlético (1-1) y eliminó al Alavés en la Copa venciendo en Montilivi (2-1).

A partir de entonces empezó el declive. Fue en San Mamés, con un penalti de Ramalho en el añadido. Derrota (1-0) como en Sevilla (2-0) una semana más tarde, para encadenar empates con el Getafe (1-1), Levante (2-2), Atlético (1-1), Alavés (2-2) y de nuevo Atleti en Copa (3-3). Tras la gesta del Wanda, el equipo sólo conoce la derrota. Y siempre encajando: Betis (3-2), Real Madrid (4-2 y 1-3), Barça (0-2) y Eibar (3-0).

Para intentar remontar el vuelo, el sábado no queda otra que ganar al Huesca. El colista de Primera viene de golear al Valladolid (4-0) y necesita apurar sus pocas opciones de permanencia. Eso sí, es el tercer conjunto menos goleador de toda la categoría y el peor visitante, con una sola victoria.