El Girona se reencuentra con su pasado más reciente

Mediodía de reencuentros el que se vivirá hoy en el Sánchez Pizjuán. El Girona, ahora en manos de Eusebio, se enfrenta a su pasado más reciente: el Sevilla que dirige Pablo Machín, el técnico que más veces se ha sentado en el banquillo de Montilivi en el fútbol profesional. Dos estilos parecidos para dos entidades, a priori, muy diferentes entre sí. Ambos, eso sí, con idéntico objetivo: ganar para seguir en la parte alta de la clasificación. Los locales, tras una semana más que movida presidida por un hipotético cambio de propietarios y la clasificación para los dieciseisavos de la Europa League. Los visitantes, con ganas de quitarse el mal regusto de boca que les dejó el 1-0 encajado el lunes en San Mamés, con un penalti más que dudoso que puso fin a una racha de ocho partidos sin perder.  

“ilusión” y bajas

Quiere Eusebio que su equipo de continuidad a “la misma línea de juego que el equipo está demostrando en cada partido” ante un rival que está en un “buen momento”. Por ello, y pese a las bajas, una rutina ya habitual a lo largo de estos dos últimos meses, los catalanes se presentan a la cita cargados de “ilusion” y dispuestos a mantener su buen rendimiento lejos de Montilivi, donde solo han encajado una derrota. Iraizoz seguirá bajo palos después de que Bounou, el portero titular, se quedara de nuevo fuera de la convocatoria al no haberse recuperado a tiempo de su lesión. También están descartados Aday, Mojica, Patrick Roberts, Planas y Muniesa, por lo que de nuevo el filial ha tenido que salir al rescate. Esta vez han viajado Suárez, Valery y Paik. Con tantas bajas en banda izquierda, el carril volverá a ser para un centrocampista como lo es Àlex Granell, a la espera de reforzar esta posición cuando se abra el mercado de invierno. 

Será la primera vez que el Girona se enfrente a Pablo Machín después de que este abandonara hace unos meses el club rojiblanco, en el que ha estado cuatro años y donde ha logrado, además de una permanencia que parecía imposible, un histórico ascenso a Primera, entre otros éxitos. Ahora, al frente del Sevilla y fiel a su habitual sistema de juego con tres centrales y carrileros, intentará batir a un equipo que conoce a la perfección. Recupera a Pablo Sarabia, ausente en la Europa League, pero no podrá contar con el sancionado Franco Vázquez ni los lesionados Aleix Vidal y  Gonalons.