El Girona necesita un milagro para soñar

Un gran gol de Aketxe obliga al conjunto catalán a ganar por más de dos tantos para seguir con vida en el playoff

El Eibar jugó con diez toda la segunda mitad por una expulsión del lateral zurdo Álvaro Tejero

Resumen, goles y highlights del Girona 0 - 1 Eibar de la ida de los play off de ascenso a Primera División

Carles Rosell

Llueva o haga sol. Por la tarde o de noche. Da igual el rival. Al Girona no le sale lo del playoff por más veces que lo intente. Su sexta aventura ha empezado con muy mal pie y necesita un milagro para mantenerla con vida. La derrota en Montilivi ante el Eibar le obliga a ganar por dos goles, como mínimo, en Ipurúa. Toda una hazaña.

Girona-Eibar

Play-off LaLiga SmartBank

0
1
Alineaciones
Girona
Juan Carlos, Arnau Martínez, Santi Bueno, Bernardo, Juanpe (Pablo Moreno, 46'), Jairo, Pol Lozano (Iván Martin, 46'), Aleix García, Samu Saiz (Nahuel Bustos, 73'), Álex Baena y Stuani.
Eibar
Cantero, Rober Correa, Venancio, Chema Rodríguez, Tejero, Sergio Álvarez, Edu Expósito (Toño, 88'), Corpas (Arbilla, 46'), Aketxe (Rahmani, 79'), Quique González (Etxeita, 88') y Fran Sol (Blanco Leschuk, 63').

Decidió un golazo de Aketxe, que marcó desde su casa cerca de la media hora de juego. El 0-1 momentáneo hacía justicia a un conjunto, el de Garitano, que dominó el primer acto. Gozó incluso de dos clarísimas ocasiones para marcar: Arnau sacó el balón de encima la línea y Expósito mandó un zapatazo al larguero. Aunque todo cambió antes del descanso. Tejero vio dos amarillas en un santiamén y se marchó a la caseta.

Merecieron más

Movió ficha Míchel, dando entrada a Pablo Moreno e Iván Martín, y el Girona mejoró. Buscó el empate con ahínco, pero pese a disparar el contador de la posesión, se ahogó en la orilla. Le faltó velocidad y fue demasiado previsible. Pese a ello, pudo empatar con un cabezazo de Stuani que impactó con la madera.

O con un tiro de Aleix que se marchó fuera por muy poco. El Eibar, mucho más conservador y con un hombre menos, se cerró y defendió con uñas y dientes. Juntó sus líneas e hizo imposible que Montilivi creyera en la remontada. Se pidieron más de un penalti y en la otra portería, alguna excursión peligrosa al contragolpe y poco más. No se movió el marcador, pese al empuje y la insistencia. El 0-1 complica, y mucho, las cosas para los catalanes.