El Girona llega al ecuador de la pretemporada con sólo tres caras nuevas

Quique Cárcel sigue con muchas llegadas pendientes de cerrar de cara al inicio de Liga, aunque “el verano será largo”

La opción de Edu Expósito se está retrasando debido al fuerte interés del Elche por el catalán

Michel, sin caras nuevas

Michel, sin caras nuevas / Twitter Girona FC

Marc Brugués

Lo tenía claro Quique Cárcel cuando el pasado día 5 aseguró que al Girona le esperaba “un verano largo” para poder tener el “equipo más competitivo posible”. El director deportivo vaticinaba un mercado lento y con poco movimiento en julio, como está pasando en la mayoría de clubes de Primera. 

En Montilivi costó pero el lunes se abrió el grifo de los fichajes con las llegadas de Castellanos (New York City), Yan Couto (Manchester City) y David López (Espanyol). Tres caras nuevas muy bienvenidas que, eso sí, son sólo una cuarta parte de lo que necesita el equipo. 

Cárcel pronosticó una docena de incorporaciones, por lo que todavía queda mucha faena por hacer.

Aun queda para que se cierre el mercado, pero Míchel ha tenido que trabajar, esta pretemporada, con más jugadores de la cantera que del primer equipo. Diecisiete días quedan para el debut liguero en Mestalla, donde el técnico espera poder contar con mas materia prima que en estos primeros amistosos de pretemporada. 

Muchos nombres

Pegado el teléfono, así estuvo Cárcel durante el choque ante el Andorra. Sobre la mesa, varios nombres como los de Javi Hernández (Leganés) o Edu Expósito (Eibar).  

El caso del centrocampista catalán del conjunto armero, la aparición del Elche ha encarecido al jugador, por quien el Eibar pide una cifra cercana a los 4 millones de euros. La idea del barcelonés es recalar en Girona aunque si el Elche gana la partida económica se lo llevará. 

Por otro lado, en el lateral zurdo, el principal objetivo es Hernández. Tras la marcha de Juncà y Jairo, el del ‘Lega’ es el favorito pero su club ya rechazó la primera oferta del Girona por él. La alternativa es Pep Chavarría, del Real Zaragoza. Gusta mucho a la dirección deportiva pero tiene contrato en La Romareda y no quieren malvenderlo por menos de dos millones a un Girona que sigue buscando nombres para cerrar una plantilla que compita.