Girona - Barça: Cierto recelo y muchas dudas

El Girona-Barça que puede jugarse en Miami sigue dividiendo a la afición gerundense

El Girona-Barça que puede jugarse en Miami sigue dividiendo a la afición gerundense / VALENTÍ ENRICH

Carles Rosell

Los hay que están a favor. Que defienden esta opción a capa y espada. También existe el bando opuesto; los que no quieren ni oir a hablar del tema y que lo consideran como una propuesta absurda. Cada vez son más las voces que se posicionan a un lado o en otro, desde que pocas semanas atrás se puso sobre la mesa la posibilidad de que Girona y Barça se enfrenten esta temporada en los Estados Unidos.

Ambos puntos de vista conviven entre los aficionados rojiblancos; aunque el posicionamiento mayoritario, por lo menos si se le hace caso a lo que se vio ayer, es más de malestar que no de otra cosa. Hay cierto recelo y también dudas. Muchas dudas. 

El Espai Cívic Barri Vell-Mercadal sirvió como escenario para una reunión informativa. A lo largo de una hora, la Federación de Peñas del Girona y también Aficiones Unidas, que pertenece a LaLiga, intentaron arrojar algo de luz al medio centenar de asistentes que no quisieron perder detalle.

Tanto Quim Alegret como Pepe Hidalgo, máximos exponentes de ambos organismos, respectivamente, contaron que esa misma mañana se habían reunido con el club. En este encuentro se tocaron algunos puntos clave sobre el posible derbi en Miami. Lo más importante, es que se acordó que las compensaciones económicas dirigidas a los abonados (del 20 y 40 por ciento, dependiendo de la opción que se elija) se pagarán antes del 30 de junio del 2019.

El Girona les informó también que uno de los artículos de las Condiciones del Abono establece que puede haber un “cambio de localidad” en algún partido de la temporada y que, en este caso, “se bonificaría el importe correspondiente” al afectado.    

quejas

Hidalgo, que criticó la “falta de información” del Girona en todo este tema, defendió la idea de jugar en Miami. Lo valoró como “una oportunidad única” y recordó que “la temporada pasada el Barça jugó en Sudáfrica entre la penúltima y última jornada y nadie dijo nada”. Aunque matizó: “Sí que es cierto que en este caso hay gente afectada y hay que encontrar las mejores soluciones”. 

Muy diferente fue el punto de vista de la mayoría de los asistentes. Muchas dudas, interrogantes y cierta crítica hacia LaLiga. Incluso se llegó a culpar directamente a su presidente, Javier Tebas. La postura general no era otra que defender que el derbi se quede en Montilivi. De momento, todavía no hay un veredicto. Tocará esperar...