Girona: Al asalto del Camp Nou

Llegados a este punto, ¿y por qué no? Es decir, de perdidos al río. Sí, Barça y Girona son dos mundos opuestos. Esto lo sabe cualquiera. Pero en fútbol y a un solo partido, todo es posible. Todo. Asentado como lo están los chicos de Machín a Primera y con los deberes casi hechos. Y sin muy poco que perder y muchísimo que ganar.

Así se presentarán este sábado al Camp Nou. Así, y desatados. Octavos en la tabla, con Europa mucho más cerca que el descenso, y una racha envidiable en Montilivi y más que correcta a domicilio. A todo ello, se le añaden las buenas actuaciones en Mestalla, el Wanda y el Pizjuán, y el panorama desigual del inicio se ve desde otra perspectiva.

Son muchos los argumentos que pueden convencer a cualquiera y hacerle ver que el Girona puede hacerle daño al Barça. Se ve desde fuera, ¿cómo no se hará desde dentro? Al vestuario ya hace días que ha entrado la ilusión y las ganas por pisar el Camp Nou. A ellos, se le han unido el hambre y la ambición. Y la fe. Creen los rojiblancos que pueden dar la campanada. Es más, están convencidos.

Desde la humildad y el respeto; la receta que les ha llevado hasta la situación privilegiada que ostentan a día de hoy. Pero hay ese punto de optimismo; esa visión positiva, que no había en el choque de la primera vuelta. Ya no es por sensaciones. Así lo expresan los mismos protagonistas. Lo hicieron ayer los elegidos que atendieron a la prensa durante el ‘media day’ que el club se sacó de la manga. Algo inusual en una semana grande. Histórica.

Sí, se puede

El primero en desfilar fue Àlex Granell, santo y seña del Girona y uno de los iconos de este equipo. Un futbolista que todavía tiene la espina clava del primer tramo de calendario, cuando se perdió la visita del Barça en Montilivi por decisión técnica.

“El ascenso te da premios como este. Es el partido más bonito para cualquier futbolista y que más ilusiona a la afición. Espero jugar”, reflexionaba.

Y sí, le ve opciones a los suyos. “En la primera vuelta llegamos al partido más necesitados. Ahora estamos mucho más tranquilos y con una dosis más alta de ambición”.

Esa es la clave para Granell. El hambre. “Competiremos de tú a tú”, prometía. Como lo hicieron el Alavés, Getafe o Chelsea, equipos que le han generado muchas dificultades a los de Valverde. “Puede ser un ejemplo para nosotros”.

Lo mismo que piensa Marc Muniesa. “Tenemos que fijarnos en lo que hicieron ellos. Les jugaron muy bien y alguno de ellos rascó un empate”.

Para el de Lloret, además, la cita viene con un bonus extra: su pasado azulgrana. “Será un cúmulo de sensaciones volver al Camp Nou. Es el club en el que crecí y que me dio la oportunidad de debutar como profesional”, recordaba.

El central, con Guardiola, disputó dos partidos de Liga y los mismos de Champions antes de hacer las maletas y poner rumbo hacia Stoke. De su etapa todavía guarda una grata amistad con Sergi Roberto. “He hablado con él y le he hecho saber que nos estamos jugando mucho, que fuimos capaces de quitarle cuatro puntos al Atleti y tres al Madrid y que intentaremos ganar. Al menos, le he pedido que como mínimo nos dejen rascar algo”. Sí, en tono de broma. De ‘colegueo’. Pero ese es el sentimiento en Girona.

Lo escenificaba Christian Stuani. Un ‘perro viejo’ en esto de la Primera División y alguien que ya sabe lo que es jugar (y marcar) en el templo azulgrana. “Será muy difícil porque el Barça es uno de los mejores equipos del mundo, pero nosotros hemos demostrado que podemos hacer cosas buenas. Si también tenemos nuestras armas, ¿por qué no podemos hacerlo bien y ganar?”, decía.

Cree en las “posibilidades” de puntuar, como el resto de sus compañeros, además de elogiar a dos “bestias” en ataque como lo son Leo Messi y su compatriota Luis Suárez. “Son dos de los mejores delanteros del mundo y juntos, son dinamita pura. Pero no nos asusta nada. Siempre nos vemos con opciones y en cada campo hacemos nuestro juego”.

Por el mismo camino tiró Portu. “Tenemos ilusión, pero también muchísima ilusión. Hemos competido en todos los estadios y esperamos hacer lo mismo en el Camp Nou”. Y apuntilló. “Messi y Suárez son estratosféricos. Pero con Stuani lo hemos hablado y tenemos una bonita opción de acercarnos a sus cifras”.