El Girona añade otro empate a su colección

Puso el punto y final el Girona a la primera vuelta con otro empate, el noveno de la temporada en LaLiga, y se queda a dos puntos de igualar el registro que el equipo consiguió la temporada pasada con Pablo Machín en el banquillo (26 puntos) rojiblanco. Stuani adelantó a los catalanes con una chilena de videoteca, pero tras el descanso Borja Bastón aprovechó una indecisión de la zaga para hacer el empate, a la postre definitivo. 

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LaLiga

GIR

1

1

ALA

Alineaciones

Girona
Bono; Porro, Alcalá, Bernardo, Juanpe, Granell (Aleix García, 73'); Pere Pons, Douglas Luiz (Valery, 60'); Portu (Lozano, 82'), Borja García; Stuani.

Alavés
Pacheco; Ximo, Laguardia, Maripán, Duarte; Sobrino (Brasanac, 78'), Pina, Manu García, Burgui (Aguirregabiria, 92'); Borja Bastón (Guidetti, 88'), Calleri.

Goles

1-0 m. 11 Stuani. 1-1 M. 50 Borja Bastón.

Árbitro

Sánchez Martínez (Murcia). TA: Douglas Luiz (40'), Stuani (61') y Pere Pons (79') / Calleri (21') y Laguardia (52').

Incidencias

Montilivi. 10.303 espectadores.

Eusebio apostó por un once totalmente renovado para medirse al Alavés en Montilivi. Sólo dos hombres (Alcalá y Douglas Luiz) repitieron respecto al partido copero con el Atlético, donde los rojiblancos sumaron un valioso empate dadas las circunstancias. Abelardo también tuvo que sacudir el árbol tras la marcha de Ibai al Athletic esta misma semana. Y lo acusó el conjunto babazorro.

Stuani, como no podía ser de otra manera, protagonizó los dos primeros acercamientos claros del Girona sobre la portería de Pacheco. Primero lo intentó con un cabezazo tras una incursión de Álex Granell por la izquierda y después buscó fortuna en el interior del área chica encimado por Maripán, circunstancia que le impidió llegar al centro de Portu, la bala rojiblanca por la derecha. 

A la tercera, sin embargo, fue la vencida. El charrúa puso Motilivi patas arriba con una soberbia chilena que sorprendió a Pacheco y desató la locura en las gradas. Antes, Bono ya había desatado el éxtasis en su hinchada con una ruleta sobre Calleri que el cancerbero marroquí ejecutó con toda la sangre del mundo. La renovación, la verdad, le ha sentado de maravilla. 

El gol le sentó fatal al Alavés, donde sólo Calleri se reveló. El argentino se sacó de la chistera una rabona deliciosa que golpeó en la cepa del poste, pero la acción estaba anulada por fuera de juego. Minutos después, era Bono y no el árbitro quien evitaba que la sangre llegara al río con una enorme parada a Borja Bastón. Tras tocar el balón en el meta, Alcalá, que pasaba por allí, lo desviaba a córner cuando ya se colaba. Fue la antesala de la última ocasión clara de la primera parte, un zapatazo de Pedro Porro que dio en la madera por fuera cuando el gol ya se cantaba.

Tras el paso por vestuarios y con el marcador adverso Abelardo cambió de planes y ordenó a sus pupilos presionar mucho más arriba al Girona con la intención de hacer dudar a los rojiblancos en la salida de balón. Funcionó al principio, pero poco a poco la estratagema perdió peso. Sobre todo cuando el Alavés empezó a acusar el esfuerzo. Aun así, en una acción aislada, los babazorros consiguieron empatar el partido tras un remate en semifallo de Calleri que aprovechó Borja Bastón para batir a Bono a bocajarro con un zurdazo. 

La respuesta de Eusebio fue retirar del terreno de juego a Douglas Luiz e introducir al canterano Valery devolviendo a Álex Granell a su puesto natural en el centro del campo. La permuta surtió efecto y a partir de ahí el Girona recuperó el control del juego. La mirilla arriba, sin embargo, seguía desviada.

Un derribo sobre Portu dentro del área pudo cambiar la historia, pero tras consultar con el VAR Sánchez Martínez ordenó reemprender el juego y en los últimos diez minutos el marcador ya no se movió.