La afición del Girona responde: agotadas las 400 entradas para El Sadar

El club ya ha vendido todas las entradas que había recibido de Osasuna y contará con el apoyo de la 'marea rojiblanca'

La Penya Gironina ya ha llenado un autobús para El Sadar de cara al decisivo duelo para clasificarse para la Conference

Afición del Girona en un partido en Montilivi

Afición del Girona en un partido en Montilivi

Marc Brugués

El Girona no estará solo el domingo en Pamplona (18:30h). Una pequeña marea rojiblanca estará presente en el estadio navarro para empujar a los Castellanos, Stuani y compañía hacia el sueño europeo. El club ha vendido las 400 entradas que tenía por el partido y, además, habrá un buen grupo de seguidores más que se desplazarán en vehículos particulares.

A pesar de los resultados del último mes, la notable trayectoria de toda la temporada ha permitido que el equipo se haya plantado en las puertas de la última jornada con opciones de clasificarse para la Conference League. Una victoria en El Sadar, combinada con un empate o derrota del Athletic Club en el Bernabéu daría el billete a Europa a los gerundenses. Será un hito histórico y al mismo tiempo inédito para un club que hace un año apenas se clasificaba para el play-off de ascenso. Por todo ello, muchos aficionados no quieren perdérselo y el domingo estarán en Pamplona.

La ilusión de vivir la clasificación ha generado debate en el entorno. Sin ir más lejos, hasta hace poco Míchel que no habla claro y tanto Delfí Geli como Quique Cárcel han mostrado sus respetos a competir en Europa. La exigencia de jugar dos partidos por semana, viajar lejos y tener que confeccionar una plantilla muy larga hace que también entre la afición haya debate. "La mayoría de gente quiere la guinda de la tarta y así ir a Europa y disfrutar de partidos internacionales oficiales del Girona. Sin embargo, yo no lo veo nada claro. Hay que crecer más como club, masa social y tener una plantilla más amplia para jugar tantos partidos", dice Lluís Bosch, miembro de la Penya Gironina, que ha cerrado un bus para el domingo.

En la misma línea reacia se muestra el presidente de la Federació de Penyes, Cristóbal Sánchez. "Como aficionado, por supuesto que quiero ir. Hace mucha ilusión, por supuesto. Ahora bien, si quiero tener un Mercedes, primero tengo que tener un garaje; no lo dejaré aparcado en la calle. Y por tanto, primero hay que ordenar nuestra casa: hacer un estadio de cemento, con lavabos y cómodo como tienen en Huesca y tantos otros lugares", asegura. Sánchez considera que debe ser la propiedad la que marque si el club está listo para entrar en Europa o no. "Como aficionado, si ocurre, yo haré la ola. Sin embargo, toco con los pies en el suelo. Recuerdo a Granada, Espanyol o Málaga que lo pagaron muy caro".

"Estar es una ilusión para muchos gerundenses, no ninguna obligación" dice Pepe Sierra (Penya Immortal). Sierra reconoce el debate abierto entre la afición pero recuerda que si el Girona llega a Europa, tocará disfrutarlo hasta donde esté. "No hace falta estirar más el brazo que la manga ni que lleguemos a la final de la Conference. Si se entra, lo celebraremos muchísimo, claro. Entonces, si nos eliminan enseguida, nada debería pasar", reflexiona.