Épico triunfo de Cima en la etapa de los sprinters

Cima se convierte en el quinto italiano en ganar una etapa en este Giro

Cima se convierte en el quinto italiano en ganar una etapa en este Giro / Perform

Cristina Moreno

Damiano Cima dio la victoria a Nippo- Vini Fantini en la decimoctava etapa del Giro de Italia tras protagonizar una larga fuga y un agónico tramo final. Apuntada en rojo en el calendario de los sprinters, al final la gloria fue para el esfuerzo de la fuga.

Jornada de transición la de hoy en el Giro con tan solo un puerto de cuarta categoría, el Pieve di Alpago, que afrontar por parte del pelotón tras dos días de dura montaña. Momento para los sprinters antes de entrar en la recta final de la carrera.

Ya desde el inicio, en el kilómetro 50, un grupo de tres ciclistas se lanzó a la fuga. En la escapada, Nico DenzDamiano Cima y Mirco Maestri que llegaron a disfrutar de más de seis minutos de ventaja sobre el grupo del líder. Diferencia que no disminuyó en el alto que afrontaron en el kilómetro 118. En la bajada, se puso a trabajar Bora para tirar de un pelotón que rodaba a buen ritmo apoyados por Israel Cycling Academy.

Por debajo ya de los tres minutos pasaron el sprint intermedio de Conegliano donde Démare lanzó un ataque demoledor para cruzar la meta volante por delante de Pascal Ackermann al que dejó prácticamente sentado. Se anotó el francés los cinco puntos, concediendo cuatro al del Bora para afianzar además esa ‘maglia ciclamino’ como el primer clasificado por puntos. Los 12, se los llevó Maestri.

Kilómetro a kilómetro la etapa iba avanzando mientras se adentraba por los paisajes del Véneto y la escapada no cedía al empuje del pelotón. Mantenían los tres héroes del día una diferencia media de tres minutos hasta que el pelotón se puso a trabajar. Era el día de los sprinters, probablemente en su última oportunidad en este Giro y había que intentarlo todo. Aún por delante, una última meta volante, en Scorzè, que tampoco iba a ser decisiva en este día. Movistar se posicionaba para tener bien colocada en la parte de delante al líder, Richard Carapaz.

Lo que parecía un día tranquilo se convirtió en un épico tramo final para los tres fugados que apretaron los dientes en el último kilómetro cuando el pelotón ya respiraba sobre sus cascos. Denz hacía de motor de ese pequeño grupo que aspiraba a hacer historia en una etapa a ‘priori’ sin sobresaltos. Y cuando todo parecía perdido, con el pelotón a punto de engullir todo ese trabajo, Cima pasó el primero por la línea de meta situada en Santa Maria di Sala. Premio al esfuerzo de una escapada de más de 150 kilómetros.

Por detrás, la pelea se centraba en el maillot de la regularidad que parecía reservado para Démare. Pero se vio tapado en los últimos metros el francés y acabó cediendo ante Ackermann, mejor posicionado. Emoción final en una etapa larga que para nada, fue intrascendente.