Márquez se confiesa: "Estoy soltero y no por casualidad..."

Marc Márquez visita 'Viajando con Chester', el programa de Risto Mejide, y habla de sus rutinas y su vida personal

El piloto de Honda se abre en canal y habla sobre cómo ha sobrellevado estos años de lesión

Marc Márquez se confiesa en la entrevista con Risto Mejide

Marc Márquez se confiesa en la entrevista con Risto Mejide / 'Viajando con Chester'

Mireia Llaudó

Marc Márquez acudió a 'Viajando con Chester', programa dirigido por Risto Mejide, para hablar de estos tres últimos años en que ha estado lesionado y cómo se encuentra ahora, y aprovechó para abrirse en canal y hablar más que nunca sobre su vida personal

Márquez acumula un total de ocho títulos mundiales, seis de ellos en la categoría reina. Un palmarés increíble que lo coloca en el paseo de la fama del motociclismo y lo convierte en el piloto más relevante de los últimos años, uno de los mejores de la historia. En el Gran Premio de España de 2020 se fracturó el brazo, algo que supuso su descenso a los infiernos. "De arrasar, de estar en la gloria", tal como dice él mismo, hasta abajo de todo. "El infierno es duro, porque venía de una carrera deportiva que parecía un superhéroe. Y de golpe, de un día para el otro, fractura, infección, operaciones... no salen las cosas".

Han sido tres años de operaciones y de dolor: "Ganaba carreras, porque gané alguna carrera, y me salía llorar cuando ganaba". Este sufrimiento le hizo perder su eterna sonrisa, el rasgo que más lo ha identificado a lo largo de su carrera a pesar de los altibajos. "He estado jodido", afirma. Ahora, parece que todo empieza a quedar atrás. Su operación más reciente, la que le prometió a su abuelo que sería la última a la que sometería su brazo antes de rendirse y retirarse, le ha quitado el dolor y le ha devuelto la sonrisa. Aun así, se niega a cantar victoria, eso será "cuando realmente esté luchando por victorias cada fin de semana. Estoy cerca, pero aún no".

Risto aprovechó la ocasión para sacar a relucir uno de los temas más polémicos de la carrera del '93': su turbulenta relación con Valentino Rossi. Márquez no duda a la hora de hablar sobre lo que pasó en el Gran Premio de Malasia de 2015: "me tiró". Tiene claro que no fue un accidente, sino algo deliberado. Sin embargo, a pesar del gesto, en un inicio había predisposición por parte del piloto de Cervera de arreglar la situación y acercar posturas. Ahora ya no: "no tengo que ser amigo de todo el mundo".  

Marc es un loco del motociclismo. Probablemente es por ello que ha soportado tanto dolor y sufrimiento, porque se negaba a dejar atrás la adrenalina y su pasión por las motos. Toda su vida gira alrededor del motor, y tiene unas rutinas estrictas para rendir al máximo nivel: "De lunes a sábado, hago mi cardio por las mañanas, como y hago mi siesta pequeña para recuperar lo de la mañana". El domingo, su único día libre, lo aprovecha para descansar, aunque admite que le cuesta mucho parar o concentrarse en actividades más relajadas: "me puedo tirar cuatro horas jugando a la Play o viendo partidos de fútbol", pero lamenta que, de vez en cuando, se sorprende a sí mismo haciendo abdominales en el sofá. 

Estas estrictas rutinas y el hecho de que el deporte monopolice su vida hacen que tenga que dejar de lado realidades presentes en la vida del resto de los mortales, como "formar una família", tal como indica Risto. Márquez no duda: "Tengo 29 años, estoy soltero y no por casualidad". Para él, es una cuestión de prioridades. A lo largo de toda su carrera profesional, solo se le ha conocido una pareja pública: Lucía Rivera, hija de Blanca Romero y Cayetano Rivera. Aunque tuvo una gran repercusión, probablemente la tozudez de Marc y sus rutinas apagó la llama antes de tiempo.

Sin embargo, como todo chaval joven a punto de cumplir los treinta y aunque las relaciones no son su prioridad, no duda en afirmar con su sonrisa pilla que, de vez en cuando, usa Instagram para ligar: "algún direct cae, en ambas direcciones".