Los partidos podrán pararse dos veces para beber

Ramón Fuentes

Este viernes arranca la Liga en Primera división. Será en Montilivi donde empiece a rodar el balón con el choque entre Girona y Valladolid; cerrando esta primera jornada el enfrentamiento entre el Betis y el Levante. Y tanto en Girona como en Sevilla podría pararse el partido una vez por cada tiempo para beber. La Real Federación Española de Fútbol hacía oficial en el día de ayer la autorización de poder llevar a cabo una pausa en los partidos de Primera y Segunda división cuando “la temperatura en ese momento fuera superior a los 30 grados”. Interrupción eso si que limita a los meses de agosto, septiembre, mayo, junio o, en su caso julio.

Para poder llevarla a cabo deberán solicitarla al colegiado del encuentro con una antelación mínima de 30 minutos antes del comienzo del partido. No es la primera vez que se pone en práctica esta normativa FIFA vigente desde el pasado Mundial de FIFA. Ya en agosto del 2017 la propia RFEF emitió una circular, entonces firmada por Esther Gascón como Secretaria General, donde habilitaba esta opción siempre que la temperatura “sea notablemente elevada y aconseje la hidratación de los futbolistas”. De hecho es una medida que se ha venido empleando durante la pretemporada permitiendo estos parones en torno al minuto 22 de cada período.

Volviendo al escrito actual, la RFEF deja claro que, en caso de que un equipo lo solicitara y otro no, el árbitro está facultado para acordar esté parón “valorando las condiciones climáticas para la protección de la salud de los futbolistas y del propio equipo arbitral”. En cualquiera de los dos supuestos, el árbitro deberá comunicar a los clubes la decisión a adoptar antes del comienzo del encuentro.

Los tres minutos para beber contradice las nuevas normas de la IFAB donde establece sólo un minuto

Pero la propia circular de la RFEF puede incurrir un error, concretamente en el párrafo tercero relativo a la duración del mismo donde establece que "Las pausas para enfriamiento tendrán una duración máxima de tres minutos" y serán implementadas por el árbitro aproximadamente a los 30 y 75 minutos de juego. El tiempo perdido se sumará al tiempo añadido al final de cada mitad”  Pues bien esta medida contraviene las normas de la IFAB vigentes desde el pasado 1 de junio. En las mismas, concretamente en la Regla VII relativa a la duración del partido y en la recuperación del tiempo perdido, deja claro la norma de la IFAB que las paradas de juego para beber, "no serán superiores a un minuto". Habrá que ver entonces que tiempo aplican los árbitros en el terreno de juego.

La circular emitida por la RFEF deja a su vez claro que el árbitro “tendrá la facultar de dejar sin efecto las pausas de enfriamiento “siempre y cuando las condiciones climatológicas hubieran cambiado de manera manifiesta”.