La Guardia Civil interroga a investigados y testigos de la pelea de Mallorca

EFE

La Guardia Civil ha iniciado este miércoles los interrogatorios a investigados y testigos de la riña multitudinaria entre padres de futbolistas infantiles del partido Alaró-Collerense disputado el pasado fin de semana en Alaró (Mallorca).

Los agentes de la Benemérita ya han visionado el vídeo de los incidentes y han tomado declaración a varias personas, entre ellas, un policía local que estuvo presente en la batalla campal entre progenitores y aficionados en el campo del Alaró.

En declaraciones a los periodistas, uno de los testigos ha calificado de "vergonzoso" lo ocurrido, mientras que el policía ha comentado que varios de los involucrados en los hechos están "muy arrepentidos".

Entre las medidas cautelares que podría adoptar el Comité de Competición de la FFIB está el cierre de los campos del Alaró y del Collerense.

Por otra parte, el fútbol de Baleares prevé elaborar un registro de personas violentas, actuar contra los espectadores antideportivos y guardar un minuto de silencio en todos los partidos de categorías inferiores de la próxima jornada en protestas por unos hechos lamentables que han dado la vuelta al mundo.

informan a la Delegada de Gobierno de Baleares

La delegada del Gobierno en Baleares, María Salom, ha recibido este miércoles, de manos del presidente de la Federación de Fútbol de las Islas Baleares (FFIB), Miquel Bestard, el acta del árbitro y el vídeo del partido de infantiles entre el Alaró y el Collerense que degeneró el pasado fin de semana en una pelea multitudinaria entre varios padres de los jugadores.

"Estos hechos podrían ser constitutivos de una acción administrativa disciplinaria", señala el informe elaborado por la Comisión Antiviolencia, que no posee "al día de hoy potestad sancionadora por conductas realizadas por personas no federadas".

Añade que es "evidente" que debe existir una "incompatibilidad entre el deporte y la violencia, especialmente la relacionada con motivaciones racistas o xenófobas, así como contra comportamientos y actitudes racistas, xenófobas e intolerantes en acontecimientos deportivos".

La Comisión Antiviolencia de la FFIB, cuya misión es "promover la lucha contra la violencia, el racismo, la xenofobia y la intolerancia en el deporte, recuerda, ha considerado, asimismo, "muy graves los incidentes".

Califica de "espectáculo lamentable" la batalla campal entre progenitores "en presencia de futbolistas menores de edad", precisa, "con el agravante de que algunos de ellos eran familiares o padres de los federados".

La Comisión Antiviolencia denunciará los hechos ante la Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de Balears a la espera de los resultados del informe de la Guardia Civil de Inca, que hoy ha empezado a tomar declaración a investigados y testigos de la batalla campal entre padres y aficionados.