La FIFA modifica el procediimiento de los controles antidopaje en los partidos

Gianni Infantino, presidente de la FIFA

Gianni Infantino, presidente de la FIFA / EFE

Ramón Fuentes

La FIFA acaba de hacer oficial a través de su circular 1655 los importantes cambios en el Reglamento Antidopaje que entraran en vigor a partir del próximo 14 de enero y que pretenden adaptarse aún más al estándar oficial de la AMA (Agencia Mundial Antidopaje). Dichos cambios pasan primero por cambios en la redacción del mismo y al procedimiento del mismo.

En cuanto al primero, el reglamento recuerda la obligatoriedad de los jugadores o equipos que hayan sido seleccionados en el grupo de control registrado de dar constancia de su paradero. Y recuerda que, en caso de no producirse o no presentarse durante tres veces en un mismo año, estará expuesto a las graves sanciones que impone la FIFA. Pero lo más llamativo sin duda radica en el procedimiento que a partir de ahora pretende poner en marcha la FIFA para los controles antidopaje en los partidos. 

Como textualmente expresa en la circular, se va a implementar este nuevo mecanismo para “seleccionador jugadores de forma aleatoria en los controles de competición”, nuevo procedimiento que entienden satisface mejor los requisitos de la AMA que aboga por controles antidopaje por sorpresa, sin previo aviso, protegiendo la integridad y trasparencia del sorteo. Así pues a partir del próximo 19 de enero se llevará a cabo un sorteo cerrado durante el descanso del encuentro de cada partido y en presencia de un representante de cada equipo. Tan pronto como concluya el partido, el oficial de control de dopaje notificará el resultado del sorteo a dichos representantes, quienes se encargarán de identificar a los jugadores seleccionados y garantizarán que acudan inmediatamente a la sala de control de dopaje. 

Sin duda parece claro que con este nuevo mecanismo la FIFA busca el efecto sorpresa atendiendo además a los criterios de la AMA. Debemos recordar, como así viene recogido en la propia circular, que todas las federaciones dependientes de FIFA deben adoptar este nuevo mecanismo. Lo cual implica tanto la UEFA en todas sus competiciones como la RFEF en lo que afecta a la Liga española.