Dani Fernández: De la Masia al mundo

Descubre la historia de uno de los futbolistas con más partidos en el Barça B que estuvo en varios equipos de Europa

Hizo la pretemporada con el Barça de Ronaldinho en la temporada 2004/05, la cual también fue la primera de Leo Messi

Dani Fernández en la 'Ciutat Esportiva Joan Gamper'

Dani Fernández en la 'Ciutat Esportiva Joan Gamper' / SPORT

Roger Güell

Dani Fernández Artola empezó sus andaduras en el equipo de su ciudad, Sant Feliu de Llobregat, con tan solo 7 años. Menos de un año después, el Barça lo incorporó a la Masia, donde pasó 14 años para acabar explorando media Europa. Jugaba de lateral derecho.

¿Te acuerdas del momento en el que te fichó el Barça?

“Yo estaba en el Santfeliuenc FC, con 7 años. Llevaba pocos meses jugando al fútbol y un ojeador del Barça (Albert Banaiges) me llamó. En ese momento entré en el Benjamín del club”.

“La cualidad que hizo que se fijaran en mi era que combinaba la técnica con la agresividad”.

¿Cómo era estar en la Masia?

“Recuerdo que los entrenamientos eran muy rígidos a nivel táctico, el 4-3-3 de Johan Cruyff estaba muy marcado desde la base”.

“Lo que ha cambiado mucho es el respeto hacia la figura del entrenador, en aquel entonces, a diferencia de ahora, todo el mundo le respetaba al máximo”.

¿Con qué compañeros te quedas?

“A nivel de amistad, Sergio Rodríguez ‘Rodri’ se convirtió en un hermano para mi hasta día de hoy, que seguimos siendo uña y carne. Él puede presumir de tener una Champions en su palmarés (disputó minutos en la de 2005/06 con Rijkaard)”.

“Pero en cuanto a calidad, el que más me sorprendió fue Sergio García, siempre pensé que llegaría a un top-3 de una de las grandes ligas”.

Pretemporada de 2004/05

“Hice la pretemporada de 2004/05 con el primer equipo, donde había jugadores como Ronaldinho, Deco o Messi (también era su primera)”.

"De hecho, un día le pedí a Leo que le diese mi camiseta a Ronaldinho y Deco para que me la firmaran. Por suerte, se me encendió la bombilla y le dije a él que también lo hiciese, al final fue quién le ha dado valor a esa camiseta”.

“Aun así, Andrés Iniesta es el jugador que más ilusión me genera poder decir que jugué con él. Otros eran Víctor Valdés, Oleguer, ‘Pedrito’ Rodríguez”.

Etapa en el Barça B

“Mi último año de juvenil, que era capitán, ganamos la Copa del Rey. Solo tres jugadores ascendimos directamente al B (Joan Verdú, Sergio García y yo)”.

“Soy uno de los futbolistas con más partidos jugados en el B, por eso, y ante la falta de oportunidades con el primer equipo, decidí salir. Siempre soñé con volver algún día”.

Aventura en Ucrania: Fichaje por Metalurg Donetsk

Pichi Alonso era el entrenador del equipo ucraniano donde jugaba Jordi Cruyff. Ambos me llamaron y me convencieron para firmar”.

“Emprendí mi viaje acompañado de mi mujer Alexandra, quien siempre ha sido mi motor en los buenos y ante todo en los malos momentos. Al final de todo volvimos a España siendo el doble de personas”.

“El primer año lo recuerdo con una palabra: desolación. Llegué a un país muy polarizado, donde una calle dividía entre ricos y pobres, no había punto medio.”

“En el equipo había unas 20 nacionalidades, solamente tenía tres amigos: Jordi, un jugador de Perú y uno de Rumanía, los cuales sabían hablar castellano”.

“En ese período tuve muchas conversaciones con Jordi. Tenía a su padre en un pedestal, te puedo asegurar que sabía mucho de fútbol. De hecho, yo pensaba que sería entrenador, pero su rol actual le encaja a la perfección”.

Dos años cedido en NEC Nijmegen

“Me sale la oportunidad de ir a Holanda, un país donde juegan a un fútbol muy ofensivo, de mi estilo. Se lo explico a Jordi, que conoce mucho el fútbol holandés. Él me aconseja ir y rechazar una propuesta de renovación muy interesante”.

“Además, mi mujer Alexandra estaba embarazada de mi primera hija, Morgan, y Holanda nos parecía un ambiente más propicio para ella”.

“Ese período fue muy bonito, posiblemente jugué mis dos mejores años e hicimos la mejor temporada del equipo, clasificándonos para octavos de la UEFA, donde nos eliminó el Hamburgo”.

“Además, en esa etapa también nació mi segunda hija, Mia”.

“Tras esos dos años cesiones, tuve ofertas de Espanyol y Sporting de Gijón, pero decidí quedarme en Holanda”.

Feyenoord, sueño roto

“El momento más feliz de mi carrera es cuando el Feyenoord me ficha (1,5 millones por la mitad de los derechos). Llegaba a un club de los más grandes de Holanda, y el inicio fue espectacular, me hicieron una canción y todo”.

En mi presentación me bajaron hasta el centro del campo con un helicóptero, eso impactó a toda la familia, ya que no nos lo esperábamos”.

Los primeros cinco partidos gané el MVP del encuentro, hasta el sexto, en el cual me rompí los cruzados de la rodilla derecha”.

“Viajé a Barcelona para que el Dr. Ramón Cugat me operase y no volví hasta el siguiente año”.

“En la segunda temporada, el entrenador diseñó un partido contra Excelsior (equipo satélite del club), para que yo empezara a ganar minutos. En ese mismo encuentro, me rompí los cruzados de la otra pierna. Todo el mundo empezó a llorar y tuve que volver a repetir el proceso de nuevo, con otra operación por el propio Dr. Cugat.”

Recuerdo la rehabilitación como si me hubieran pegado dos disparos en las rodillas, fue muy doloroso”.

“Coincidí con Gigi Wijnaldum, un 'trotón' con mucha calidad, distinto al resto”.

El tercer año llegó Ronald Koeman en el banquillo. Me costó entrar porque me faltaba bagaje, pero cuando entré, jugué dos buenos partidos. Me siguió dando oportunidades hasta que en el siguiente cometí un error garrafal. En el cuarto, frente a Groningen, Dusan Tadic me regateó con facilidad y anotó un gol, a pase de un tal Virgil van Dijk. Eso me condenó y me quedé en el ostracismo toda la temporada. Recuerdo que al llegar al vestuario nadie me dijo nada, ahí me sentí como si estuviera acabado, fue muy duro, incluso más que una lesión”.

Koeman era un entrenador muy distante, de escuela holandesa, su mejor cualidad era apostar por los jóvenes, como pasó en el Barça con Pedri, Gavi o Nico, pero además recuerdo que en los entrenamientos había una exigencia máxima”.

“A final de temporada se acabó mi contrato y me llamó mi antiguo entrenador que estaba en Bélgica”.

Genk: el equipo que le vio resurgir

“Genk es uno de los más grandes de Bélgica. Ganamos la copa, el trofeo más importante de mi carrera”.

“En el equipo coincidí con Kalidou Koulibaly (reciente fichaje del Chelsea), hicimos amistad porque él era una persona con un corazón enorme, alguna vez me preguntó por el Barça, él tendría 19 años y ya se le veía mucha proyección”.

“También jugamos en Europa League, donde marqué mi primer y único gol en la competición, fue ante el Luzern suizo, me acuerdo perfectamente, fue desde fuera del área y sirvió para pasar de ronda. Además, todos los jugadores cobraron una prima".

“En ese momento mis niñas ya empezaban a tomar sus propias decisiones y era consciente que tenía que hacer un último año en el extranjero antes de volver a España”.

OFI Creta, un lugar donde perderse

“Recibí la llamada de Gennaro Gattuso, que iba a ser el técnico del club y por ese motivo decidí probar suerte en Grecia, en un lugar paradisíaco donde tenía la playa a 33 pasos de mi cama.

“El nivel de la liga era muy flojo, económicamente no era para tirar cohetes. El motivo por el que dejé el equipo a media temporada es que me dejaron de pagar”.

L’Hospitalet fue el retorno deseado

En 2015 tuve una oferta del Córdoba de Segunda División, pero a los 32 años y con las dos rodillas destrozadas, no me vi preparado ni a nivel físico ni emocional. Por eso, decidí jugar en L’Hospitalet, donde me dieron el brazalete de capitán y me sentía en casa. Pasé ahí los últimos cuatro años de mi carrera y tuve la oportunidad de ser segundo entrenador, un camino que no descarto en un futuro”.

Un lugar donde ayudar a los deportistas: FisioSportiva21

“Al final de la temporada pasada decido alejarme del terreno de juego para crear un proyecto propio donde poder ayudar a los deportistas que sufren lesiones y no encuentran la salida, tal y como me pasó a mí”.

En setiembre abriré un centro de rehabilitación llamado ‘FisioSportiva21’. El nombre viene de la ubicación (situado al lado de la ‘Ciutat Esportiva Joan Gamper’) y de mi dorsal, el mismo que llevaba mi ídolo: Luis Enrique”.