España se queda sin revancha ante Portugal

El combinado luso remontó un 2-0 en contra y forzó la prórroga donde remató su pase a semifinales

Raya se convirtió en el protagonista involuntario, firmando el 2-3 en un despeje desafortunado

Adolfo y Ricardinho en una acción del encuentro

Adolfo y Ricardinho en una acción del encuentro / @SeFutbol

Cristina Moreno

No quería España hablar de revancha por ese título perdido en el Europeo de 2018 ante Portugal pero de todas no formas llegó. Portugal, remontando un 2-0 en contra, forzó la prórroga y superó a la Roja que, aunque suene a tópico, mereció más.

España-Portugal 27-09-2021

Mundial Lituania

2
4
Alineaciones
España
Jesús Herrero, Carlos Ortiz, Adolfo Fernández, Adri Martínez, Raúl Campos- cinco inicial-; Borja Díaz, Marc Tolrà, Raúl Gómez, Francisco Solano, Bebe, Chino, Juanjo (ps), José Raya y Miguel Mellado.
Portugal
Bebé, Fabio Cecilio, Bruno Coelho, Joao Matos, Ricardinho -cinco inicial-; André Coelho, Afonso Jesús, Zicky Té, Erick Mendonça, Pany Varela, Tiago Brito, Miguel Castro y Vítor Hugo (ps).

Con una intensidad digna de una final arrancó el duelo ibérico de los cuartos de final del Mundial. Había mucho en juego, la hegemonía europea y, de paso, una plaza para las semifinales. Y eso se palpaba en la pista.

Trabajo exigente para las defensas y Adolfo firmó la primera ocasión del partido, con un zurdazo, solo ante la portería lusa, que se marchó desviado.

Pasados los diez primeros minutos Portugal dio un paso adelante, forzando aún más a trabajar a la Roja que encontró en Jesús Herrero a su mejor hombre. Sus intervenciones fueron claves para evitar la ventaja de los lusos, especialmente en el segundo tramo de la primera mitad.

En el último minuto, un cadena de errores de Bebe desembocó en la sexta falta de Portugal y por tanto, el primer penalti. Jesús Herrero sirvió desde su área y el meta luso salió demasiado pronto, controló con el pecho, derribó a Alfonso y con todo ya perdido, agarró a Raúl para evitar el desastre. Falta, amarilla y Adri a los diez metros. El gallego apuntó mal ante Vitor Hugo que había sustituido a Bebe, y su disparo se marchó desviado. Oportunidad perdida y todo igualado al final de los primeros 20 minutos.

En la primera jugada de la segunda parte, avisó Ricardinho con un disparo cruzado. Pero España no iba a dejarse intimidar y apareció Adolfo al rescate. Diagonal precisa de Carlos Ortiz, nuevo fichaje azulgrana, y corrió el de Santa Coloma hacia la derecha para con un sutil toque superar por alto a Bebe para abrir el marcador. Sexto para él en el campeonato, a solo uno del máximo goleador, Ferrao.

No tardó mucho en llegar el segundo. Falta lateral, Adrián al lanzamiento y gol. Nadie esperaba ese saque directo y el gallego encontró el hueco entre una mal colocada defensa portuguesa para resarcirse de su fallo en el penalti.

Con ese segundo gol Portugal quedó prácticamente noqueada, descolocada sobre el azul, intentando volver a meterse en el partido. España aprovechó la situación para hacer correr a los de Jorge Braz que acusaron el exigente esfuerzo.

Aún así, Portugal consiguió meter presión a falta de ocho minutos con el gol de Bruno Coelho. Un lanzamiento que pilló desprevenido, por primera vez en el partido a Jesús Herrero que poco pudo hacer para detenerlo. España pidió revisión por una falta anterior sobre Adolfo pero los colegiados no apreciaron nada punible y el gol subió al marcador.

Se abría de nuevo el partido y Portugal lo aprovechó. Acción a balón parado y gol de Zicky Té. Partido empatado y vuelta a empezar. La tensión crecía por momentos en unos minutos no aptos para cardíacos. Dos nuevos paradones de Jesús Herrero, falta de puntería y un poste final mandaron el duelo a la prórroga. Diez minutos más de alto nivel.

A la prórroga

Y entonces llegó el jarro de agua fría con Raya como protagonista doble. Primero, con un trallazo que a punto estuvo de colarse entre los tres palos si no lo llega a impedir con un paradón Bebe. Después en una jugada desafortunada, con un intento de despeje que cogió un efecto indeseado y pillo a contrapie a Jesús que no pudo evitar que se colara al fondo de la red.

Tocaba sobreponerse y remar en contra, por primera vez en el partido. Faltaba aún media parte de la prórroga y Fede Vidal apostó el todo por el todo con el portero-jugador desde el principio. Y el riesgo se pagó caro. Varela aprovechó la portería vacía y afinó entre los tres palos para poner ya una ventaja insalvable.

España lo intentó de todas las maneras posibles pero el poste, Bebe y la falta de puntería evitaron el milagro.