PRIMERA DIVISIÓN - LNFS

El Barça Lassa 'regala' el primer puesto en dos minutos fatales

Boyis supera la entrada de Dani Saldise este sábado en Pamplona

Boyis supera la entrada de Dani Saldise este sábado en Pamplona / FCB

David Rubio

David Rubio

Dos minutos fatales entre el 27' y el 29' condenaron al FC Barcelona Lassa en la pista de Osasuna Magna (3-2), un resultado que deja la primera plaza prácticamente en manos de ElPozo Murcia

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PRIMERA DIVISIÓN - LNFS

3
2
Alineaciones
CA OSASUNA MAGNA, 3
(0+3): Asier (p.), Araça, Dani Saldise (1), Bynho, Rafa Usín (1) -cinco inicial-, Juninho, Roberto Martil, Éric Martel (1), Adri Ortego, Llamas y Álex Diz.
BARÇA LASSA, 2
(1+1): Dídac (p.), Boyis, Joselito, Dyego (1), Esquerdinha -cinco inicial-, Marcenio, Ferrao, Aicardo, Leo Santana, Sergio Lozano y Arthur.

Si los de Diego Giustozzi puntúan este domingo en el derbi frente al Jimbee Cartagena, acabarán primeros si suman los seis puntos en las dos jornadas que les restarán.

Fue una auténtica pena. El equipo fue desapareciendo del Pabellón Anaitasuna y solo reaccionó cuando se vio dos goles por detrás, 3-1. Pero ya era demasiado tarde.

El Barça Lassa afrontaba el choque con la moral muy alta por la victoria del martes en la pista de Movistar Inter (1-2), pero obligado a ganar para mantener la ansiada primera plaza liguera.

Con Sergio Lozano de vuelta y sin el lesionado Adolfo ni el griposo Juanjo, Dídac Plana asumió perfectamente la responsabilidad y demostró una vez más que los blaugrana tienen una de las mejores porterías del planeta.

Y el comienzo del encuentro no pudo ser mejor para los intereses azulgranas. Una falta de entendimiento local la aprovechó Dyego para internarse y combinar con Esquerdinha, cuyo disparo rebotó en Bynho y supuso el 0-1 con el que se cerró el primer acto.

Desde ese momento, ligera superioridad local en un envite muy intenso y lleno de alternativas pese al respecto que se tienen ambos equipos con el reciente recuerdo de las semifinales de la Copa de España.

El exazulgrana Rafa Usín chutó alto a los tres minutos y a Araça no encontró portería en una rápida contra... ¡Enorme el partidazo del brasileño, uno de los mejores cierres del planeta!

El Barça Lassa reaccionó con una gran acción de un Leo Santana en estado de gracia cuyo centro, demasiado potente, no pudo rematar Esquerdinha en el 10' cuando estaba en boca de gol.

Tres minutos después, una pérdida de Joselito permitió a Álex Diz marcharse de Boyis y obligó a Dídac a realizar otra enorme intervención que evitó el empate. En la siguiente acción, el portero visitante impidió el gol de Dani Saldise.

Llamas, otro jugador formado en el Barça, rozó el poste con un disparo raso y Dyego despertó a los blaugrana a un minuto del intermedio con un remate que desvió Asier.

Los de Andreu Plaza no regresaron bien de los vestuarios y Araça pudo empatar en dos acciones consecutivas. En la primera disparó fuera y en la segunda se topó con el 'muro' Dídac.

El Barça no aparecía y se hizo justicia al paso por el 27'. Éric Martel supo pisar la pelota y esperó para combinar con Dani Saldise, quien fusiló la portería blaugrana y firmó el 1-1.

La pájara barcelonista era de traca y Éric Martel anotó el 2-1 en una genial jugada con un reverso que lo dejó en una excelente condición. Y el colomense no lo desaprovechó.

Andreu Plaza no pidió tiempo muerto y Rafa Usín asestó el 3-1... era el tercer tanto local en menos de dos minutos. Suerte que Dyego se encontró con el 3-2 en un chut que rozó en un rival y no pudo detener Asier.

A diez minutos del final empezó el asedio azulgrana con cuatro ocasiones meridianas. La más clara de todas la tuvo Esquerdinha con un remate al larguero a cinco minutos del final a pase de Dyego.

En el 35, el técnico del Barça Lassa paró el partido y dio la camiseta de portero a Dyego. Había que remontar para depender de sí mismos en la lucha por la primera posición.

Sin embargo, el gol se resistió pese a que Ferrao lo tuvo en sus zapatatillas a falta de un minuto en una acción que logró desbaratar Asier. Al final, 3-2 y desazón en las huestes azulgranas. Eso sí, fue una derrota merecida, que nadie se rasgue las vestiduras.