Rivillos: "Me pego con quien sea para defender esta camiseta"

Mario Rivillos, un refuerzo de campanillas para el Barça Lassa

Mario Rivillos, un refuerzo de campanillas para el Barça Lassa / JOAN MONFORT

David Rubio

David Rubio

Después de cinco temporadas en Movistar Inter, el ala torrejonense <strong>Mario Rivillos ha firmado para las próximas tres campañas con el Barça Lassa</strong> y lo hace en el mejor momento de su carrera.

El internacional español aguantó una enorme presión la pasada temporada y terminó colaborando de forma decisiva al 'triplete verde' con Jesús Velasco en el banquillola Liga en una enorme final contra el Barçala Copa de España en los penaltis frente a ElPozo y la Champions tras humillar al Sporting de Portugal en la final en Almaty.

¿Qué sensaciones tiene ya como blaugrana?

Pues contento y con muchas ganas. Estaba muy motivado por venir aquí, es un nuevo reto y una nueva experiencia. Espero que salga todo redondo y que ganemos títulos. Hay que ir poco a poco, trabajar mucho esta pretemporada y, en mi caso, ir conociendo a mis compañeros.

Será una pretemporada más normal que la de 2016…

Comparada con la del año pasado, ésta es mucho más tranquila. No hay Mundial y tenemos tiempo, así que hay que ir progresivamente. El equipo está muy compensado y poco a poco iremos pillando el tono y nuestra mejor versión.

¿Ha tenido tiempo ya de hablar con Andreu Plaza

Bueno, me ha preguntado qué tal estoy y yo le he dicho que fantásticamente. La primera toma de contacto siempre es especial. Yo llevaba cinco años en Inter y el Barça es un club diferente que voy descubriendo poco a poco. Aún no hemos profundizado, ya habrá tiempo.

En Inter, Jesús Velasco siempre consigue que el vestuario sea una piña. Eso es clave, ¿verdad?

Al margen de si ganas o pierdes, el vestuario es lo más importante. En las buenas está siempre todo el mundo, pero cuando las cosas se ponen feas ahí es cuando tenemos que arrimar todos el hombro. Para mí la unión del vestuario es fundamental, desde el utillero hasta el último jugador.

¿La temporada pasada fue la más difícil de su carrera?

Puede ser. A nivel deportivo no empecé como habría querido por el Mundial (lo ganó Argentina contra pronóstico). Llegué un poco descolocado y me trastocó hasta mediados de temporada. Luego los rumores no me afectaron a mí, pero sí a mi repercusión. En la Liga no vine convocado al Palau. Fue decisión del míster, así que hablé con él y ningún problema. Velasco es una grandísima persona y el tema quedó ahí. Al final acabé jugando y todo bien.

Su final de temporada fue perfecto. Otro título con Inter y ‘su’ Barça, a la Champions…

(Sonríe). Hombre, yo miraba solo por Inter, pero por otro lado quería que el Barça llegase a la final y que después ganase Inter, claro. Contento, porque la Champions es un objetivo primordial para el club y tenemos que conseguirla.

¿Habló con José María García después de toda la polémica

No, no hablé con él. Él intentó que renovase, pero ya todo se sabía... era un secreto a voces que vendría aquí. Tampoco insistió mucho. Puede ser que se decepcionase, pero el mutuo respeto que nos tenemos siempre estará ahí. Es una persona que me ha dado mucho. Fue el que me sacó de Carnicer y yo lo admiro y lo respeto.

¿Qué le parece la plantilla del Barça Lassa?

Muy buena. El equipo se ha reforzado bien. Hay muchos contrastes. Gente que ataca, gente que defiende bien, uno para uno... Tenemos de todo. A ver si vamos entendiéndonos los nuevos con los que ya estaban. Esta temporada se pueden hacer grandes cosas.

¿A qué jugadores del Barça temían más en Inter?

La temporada pasada fue difícil para el Barça por las lesiones y los que más protagonismo tenían eran Ferrao y Dyego, sin menospreciar a ninguno. Eran los que llevaban el peso del ataque y nos resultaba complicado defenderlos. De todas formas, tampoco descubro nada, porque Dyego fue el MVP de la Liga y Ferrao, el ‘Pichichi’.

¿Qué pueda aportar Mario Rivillos a este Barça?

Morir por el grupo. Soy un jugador con mucho carácter y no me gusta perder. Me pego con el que sea por defender la camiseta. Mis virtudes son el desborde, la velocidad y el desequilibrio. Sobre todo verticalidad. Después hay que implicarse al máximo en las tareas defensivas.

¿Cuál sería su punto débil, lo que más le cuesta?

Quizá mi pierna derecha, que no tengo tanta salida. Es normal, porque soy zurdo, pero hay algunos que trabajan más con la derecha o tienen más recursos. Por lo demás, puedo fallar, pero siempre lo doy todo en la pista.

¿Qué pensó en la final cuando vio cómo estaba el Palau?

Cuando aluciné fue en el tercer partido. Perdimos por 6-1 y a los tres minutos ya nos ganaban por 3-0. No había visto el Palau así en toda mi vida. Fue increíble, la gente vibrando y los Dracs, espectaculares. Pensé, madre mía, ¡qué encerrona! (ríe).

¿Qué le diría a su nueva afición?

Que estoy encantado. Es un placer estar aquí. Ojalá estén contentos conmigo y pueda corresponderles con juego y con títulos.