Saltar al contenido principalSaltar al pie de página
Historia SPORT

Historia SPORT

FÚTBOL INTERNACIONAL

La jugada intimidatoria que Luis Enrique usó contra el Barça: "Busca un efecto más anímico que táctico"

El técnico del PSG utilizó en Montjuïc su revolucionaria estrategia copiada de la NFL, una acción sin apenas rédito deportivo sobre el terreno de juego

Luis Enrique: "Barcelona es mi casa"

ESPORT 3

Marc Marín

Marc Marín

Luis Enrique es un auténtico revolucionario. El técnico asturiano se ha caracterizado siempre por buscar nuevas maneras de exprimir a sus futbolistas y de potenciar el juego de un PSG que ya conquistó Europa el curso pasado y que aspira a repetir hazaña en esta temporada 25/26 en la Liga de Campeones.

Muy sonadas han sido algunas de las revoluciones que Lucho ha planteado en sus partidos y entrenamientos, copiándose incluso de deportes como el rugby. Desde los andamios que monta en los entrenamientos hasta la novedad de observar las primeras partes desde la grada. Todas ellas tienen su explicación lógica, pero hay una táctica que no pone de acuerdo a los expertos en la materia acerca de su posible rédito deportivo.

Regalar el balón al rival

Algo que empezó como una curiosa anécdota pocas veces vista sobre el césped ha pasado a ser una jugada habitual en todos y cada uno de los partidos del PSG de Luis Enrique. Nada más sacar de centro, ya sea en la primera o en la segunda parte, mandan el balón directamente a saque de banda para el rival.

Es decir, directamente regalan el balón al adversario, algo que también pudimos ver en el arranque del partido de esta noche frente al FC Barcelona, correspondiente a la segunda jornada de la fase de grupos de la Champions League. Al PSG le tocó sacar de centro tras el sorteo inicial, y el cuadro de Lucho mandó el balón directamente fuera por medio de Fabián Ruiz.

Pero, ¿qué puede aportarle realmente al PSG pegar un balonazo? ¿Sirve para presionar al rival? ¿Qué pasa si la precisión no es la que se requiere y el esférico acaba en saque de portería?

Intimidar, amedrentar

Un entrenador de Primera División consultado por SPORT asegura que, a pesar de poder presionar al rival en su propio campo, se trata de una jugada que "poco puede aportarle al PSG en cuanto a rendimiento táctico". Dicha fuente desvela que "si el rival cuenta con laterales/carrileros con un saque de banda potente, o incluso si sirven rápido de banda o despejan el balón, la estrategia queda anulada".

De hecho, algo así sucedió frente al Barça. Fabián no logró mandarla cerca del córner, sino que se quedó en zona de tres cuartos. Gerard Martín, eso sí, tardó en sacar de banda y eso favoreció la presión del PSG.

¿Pero entonces por qué la aplica el Paris Saint-Germain partido tras partido? La explicación está en una declaración de intenciones: "Busca un efecto más anímico que táctico". Consiste en intentar amedrentar al rival desde el primer minuto de juego. Que se sienta presionado, que se sienta intimidado por tener enfrente a varios de los mejores jugadores de Europa.

Comenzar un partido en tu estadio con el PSG presionándote en tu propia área puede provocar nerviosismo en los centrales y pelotazos innecesarios que le restan confianza al equipo de cara a sacar el balón jugado en las siguientes acciones del partido.

De hecho, prueba de esta explicación reside en que el cuadro parisino no realiza la misma jugada cuando encaja goles en contra, sabiendo que también debe sacar de centro con los once futbolistas parisinos por detrás del balón, en una situación idéntica al pitido inicial.