Sampaoli, de héroe a villano

Jorge Sampaoli puso rumbo a Francia el pasado mes de noviembre para reflotar la complicada situación del Rennes. El técnico argentino llegaba como el salvador que tanto tiempo llevaban esperando desde el club rojinegro, aunque el tiempo ha devuelto la realidad a la ciudad francesa. Y es que en apenas dos meses, Sampaoli ha pasado de héroe a villano en el Rennes, donde intentan gestionar un panorama cada vez más complicado que amenaza con la destitución del preparador argentino.

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La derrota de su equipo contra el Mónaco significó la quinta de manera consecutiva para los rojinegros estas últimas semanas. Desde su debut con el Rennes el pasado 24 de noviembre -con derrota incluida contra el Lille-, el entrenador argentino ha dirigido un total de 10 partidos con el club francés con un balance de tres victorias y siete derrotas. A pesar de las buenas intenciones en el inicio de su etapa en Francia, el equipo ha caído en picado estos últimos partidos hasta la decimoquinta plaza que limita con el descenso a Ligue 2.

Un equipo en caída libre

Sin opciones en Copa de Francia -el Rennes cayó contra el Troyes en enero- y sin opciones de pelear por las posiciones europeas, los rojinegros se resignan a pelear por la salvación esta temporada mientras empiezan a pedir la cabeza de Sampaoli. El preparador argentino no parece generar consenso entre los aficionados en el Roazhon Park a quien culpan de no haber aportado soluciones a la complicada situación del club desde su llegada.

Las recientes derrotas del Stade de Rennes han puesto el cargo del preparador argentino en la cuerda floja. La esperada reacción sigue sin llegar, aunque Sampaoli se muestra confiado en poder revertir la situación: "La situación no es la ideal, pero es la que hay y hay que resolverla rápido porque el club y la ciudad merecen otra cosa. Es un gran desafío", explicó Jorge Sampaoli tras terminar el partido.

El equipo tendrá una nueva oportunidad para redimirse ante su afición el próximo domingo contra el Estrasburgo. Sampaoli tiene mucho trabajo por hacer si quiere dar la vuelta a la complicada situación del Rennes en el que será su undécimo partido en el banquillo de los rojinegros. Las urgencias no permiten tropiezos a un entrenador cuyo cargo está en el aire. ¿Será capaz de revertir la situación y conseguir la salvación a final de temporada?