'Esperanza' Trincão

No todo gira en torno a Viktor Gyökeres. Su hazaña es una absoluta brutalidad (25 goles en 23 partidos; 50 en lo que va de 2024) y se ha ganado a pulso convertirse en uno de los '9' más cotizados del panorama europeo, pero empaña u opaca el grandísimo de rendimiento de varios de sus compañeros en el Sporting CP, como viene siendo el caso de Gonçalo Inácio, Ousmane Diomande, Morten Hjulmand, Geovany Quenda o un Francisco Trincão que brilla con luz propia en tierras lisboetas.

Álvaro Carreras, el 'avión' de moda en Europa

A Trincão le vino de lujo regresar a Portugal tras no acabar de cuajar en el Barça ni aprovechar del todo el 'erasmus' en Inglaterra, de la mano del Wolverhampton. El conjunto azulgrana le encontró una nueva cesión, esta vez cerquita de casa, en un Sporting CP que le devolvería la sonrisa, y que una temporada más tarde, en la 23/24 decidió efectuar su compra a cambio de siete millones de euros.

UN ASISTENTE DE LUJO

Protagonizaría una temporada 23/24 de notable alto el nacido en Viana do Castelo, registrando cifras muy buenas: 10 goles y 10 asistencias en 48 partidos. Sin duda, un fijo en los esquemas de un Rúben Amorim que hizo magia en un equipo que logró elevar hasta lo más alto en Portugal. Un año más tarde, seguiría ganando aún mayor protagonismo, convirtiéndose en una de las grandes armas de este Sporting, además de un Gyökeres que acaparía portadas partido tras partido.

Tras dos cursos bajo la batuta de Amorim, el bueno de Francisco daría ese paso adelante tan necesario en su carrera. Es vital para el equipo. Es el jugador más utilizado de la plantilla (1.929', repartidos en 23 partidos) y, con la asistencia que dio en el gol del 'honor' ante el Arsenal (1-5), alcanzó las 50 participaciones directas en los goles del Sporting CP. Y es, en lo que va de curso, el futbolista más asistente del equipo (11), además de los cuatro tantos que suma en su cuenta particular.

ECHA DE MENOS A AMORIM

Aterrizaba en el José Alvalade con el deseo de relanzar su carrera de la mano de un técnico al que conocía bien, pues ya había estado a las órdenes de Rúben Amorim en el Braga. Arrancó la pasada temporada con ciertas dudas, pero contó en todo momento con la confianza del luso y el inicio del 2024 marcó un punto de inflexión e iría 'volando' hasta final de temporada.

Ahora bien, la marcha de Amorim al United ha afectado ostensiblemente en su rendimiento. El Sporting pasa por una crisis, no solo de resultados, sino también de identidad, pues encadena cuatro derrotas por primera vez en cinco años, y a Trincão le está costando reencontrarse, igual a que todos sus compañeros.

La 'desaparición' de Gyökeres se explica, en gran parte, al 'bajón' de Trincão. El que sigue siendo, y con mucha diferencia, el mejor asistente y regateador de la liga portuguesa, no está teniendo la misma facilidad para causar desbarajustes y propiciar situaciones de gol en los últimos cuatro partidos. En Portugal confían en que el mejor Trincão esté pronto de vuelta.