La estatua de Ibrahimovic espera ubicación

Malmöe decidió en octubre del 2019 rendir homenaje a uno de sus hijos predilectos, Zlatan Ibrahimovic, con una estatua de 500 kilos que ubicó ante el Swedbank Stadium del Malmöe, club en el que el veterano delantero se formó y dio sus primeros pasos como profesional, entre 1999 y 2001.

Unido de manera perpétua a la polémica, solo un mes después de recibir este homenaje, a Ibrahimovic no se le ocurrió otra cosa que anunciar su entrada en el accionariado de uno de los máximos rivales del Malmöe, el Hammarby de Estocolmo, con el que se ha estado entrenando durante el confinamiento y en el que incluso podría acabar su carrera deportiva.

Los hinchas del Malmöe no le perdonaron esa afrenta y desde aquel momento la estatua fue atacada hasta en cuatro ocasiones hasta ser derribada, en enero del 2020.

El Ayuntamiento de la ciudad decidió retirarla para restaurarla y desde entonces está custodiada en un lugar secreto a la espera de encontrarle una ubicación.

Durante este tiempo, la ciudad de Milán, donde Ibrahimovic cumple una segunda etapa, se ha ofrecido para acoger la obra. También se ha planteado que se traslade a la capital sueca, Estocolmo, donde el delantero tiene fijada su residencia.

Malmöe se resiste a perder la estatua y está estudiando una ubicación lejos del estadio del Malmöe donde pueda ser exhibida sin miedo a ataques vandálicos.

La estatua fue esculpida en bronce por el escultor Peter Linde y costó 42.000 euros y la ciudad natal de Ibrahimovic corre con todos los gastos de mantenimiento. En este caso, también se ha hecho cargo de la restauración de la misma.