"Una árbitra acabará pitando en el Camp Nou"

Desde hace dos temporadas el arbitraje en la Liga Iberdrola es cosa de mujeres. En un paso por darle un impulso al arbitraje femenino la máxima división del fútbol femenino español pasó a ser dirigida por jóvenes colegiadas que, poco a poco, van formándose y haciéndose un nombre en la élite. Hoy en día es impensable todavía que suceda como en Alemania, donde colegiadas como Bibiana Steinhaus dirigen partidos de la Bundesliga igual que los hombres, pero en un futuro eso también llegará a España en un paso natural más hacia la igualdad.

Una de estas colegiadas, ya internacional desde el pasado mes de diciembre, es la valenciana Rita Cabañero Mompó (30/09/1993), árbitra asistente que dirige tanto en la Liga Iberdrola, en la segunda división femenina como en la Tercera División masculina. A sus 25 años, Cabañero Mompó lleva nueve temporadas en el arbitraje y ha ido quemando etapas a una velocidad imparable. “Han sido muchos años de formación entre fútbol base, regional y, desde hace dos temporadas, la Liga Iberdrola. El arbitraje está creciendo tan rápido como el fútbol femenino español y siempre soñé con todo esto, pero nunca a esta velocidad”, asegura a SPORT. 

La asistente, natural de la población de La Pobla del Duc, confiesa que empezó a arbitrar por curiosidad mientras veía un partido del equipo que entrenaba su padre. “El árbitro era más o menos de mi edad y me llamó la atención porque él seguía con su labor como si nada mientras le decían absolutamente de todo. Me entró curiosidad y ahí empezó todo”. Precisamente esos insultos y comentarios no han sido nunca un obstáculo para Rita a pesar de que por el hecho de ser mujer podrían ser todavía peores en según qué campos del país. “Al final somos todos árbitros y la gente insulta igual, ya seas hombre o mujer. No me siento más criticada por ser mujer. Siempre buscan el insulto fácil y no salen de ahí. Nosotros nos hemos de limitar a concentrarnos en el partido, intentar tomar las mejores decisiones y pasar de lo que digan”, señala.

Igualdad y compañerismo

No nota ninguna diferencia Cabañero a la hora de dirigir encuentros de hombres o mujeres. “Con los jugadores no hay ningún problema y tienen el mismo respeto por nosotras que por mis compañeros. Tampoco veo diferencias en cuanto a las quejas y al conocimiento del reglamento”, añade la colegiada, quien también destaca que ese apoyo llega de la misma manera por parte de sus compañeros árbitros, aunque sus condiciones todavía no sean las mismas: “El fútbol femenino está cogiendo carrerilla y todo cuesta. Aún no da para vivir”. 

Sueño común

De cara al futuro, Rita Cabañero tiene claro que el objetivo es “llegar a Primera”  y que es un sueño compartido por todos los colegiados -ya sean hombres o mujeres- y que “todos tienen las mismas oportunidades”. “Seguro que llegará el día en el que alguna árbitra llegue a dirigir un partido en el Camp Nou o el Bernabéu. Hay muy buen nivel y muy buena preparación en España y por eso todos podemos llegar, tanto chicas como chicos”, concluye.