La tormenta perfecta: por qué el Camp Nou fue una fiesta

Récord sobre récord. Exhibición sobre exhibición. La nueva tarde histórica del Barça femenino en el Camp Nou deja debe servir para analizar y comprender los motivos que han permitido llegar a este punto, en el que el barcelonismo se ha entregado y ha disfrutado como hacía tiempo que no lo hacía en su coliseo a un equipo de leyenda que se ha ganado el protagonismo que está consiguiendo. 

1 – El mejor equipo del mundo

Hay que empezar por lo más obvio: el Barça es el mejor equipo del mundo en estos momentos. Estamos ante un equipo de leyenda, un auténtico ‘Dream Team’ que lleva sumando casi todos sus partidos por victorias en los dos últimos años y que enamora con su juego. Liderado por una Alexia que está mejorando su juego y sus registros del curso pasado –en el que consiguió el Balón de Oro- el Barça está en disposición de no solo repetir el triplete de la 20-21, sino de superarlo con un póker inaudito hasta la fecha. 

2 – ADN Barça

Ver jugar al Barça es un espectáculo. El juego del femenino azulgrana es un reflejo de lo que es el ADN Barça’ en su pura esencia: estilo de juego ofensivo, de posesión de balón y de ocupación de los espacios, ligado a la humildad y el trabajo en equipo. El Barça femenino se ha convertido en el equipo que mejor representa el estilo y los valores. La bandera del club ahora mismo. 

3 – Reconocimiento

El Barça femenino merecía, desde hace tiempo, la oportunidad de jugar en el Camp Nou. Como reconocimiento al trabajo hecho durante años y a sus logros en el césped, pero también porque era una deuda que tenía el club con sus socias y aficionadas. El Barça tardó en concedérselo, pero una vez se tomó la decisión, la entrega del club como institución ha sido total y el partido se promocionó y promovió como se lo merecía el equipo. Ha sido la muestra definitiva de que la apuesta que hizo hace años el Barça por el femenino iba en serio y era la acertada.  

4 – Estrategia de ticketing

Una vez decidido que el Barça femenino debía jugar en el Camp Nou se debía establecer una estrategia acertada de ticketing para que la masa potencial de espectadores quisiera y pudiera acudir al partido. Y el club lo ha conseguido con creces estableciendo precios populares entre sus socios –que pagaban solo gastos de gestión- y el público general –con entradas que rondaron los 20-30 euros-. De esta manera se logró algo que durante años no se había conseguido: que muchísima gente fuera por primera vez al Camp Nou y pudiera participar del sentimiento identitario que es el Barça. Rara vez se verá a tantas familias enteras ir a un partido del masculino si no se trata de socios abonados y eso influyó en el ambiente festivo de la cita.