El Barça, a recuperar la esencia en su fortín

Las culés vuelven de la ida de 'semis' europeas de París con un buen resultado y tendrán que rematar en el Johan

El Barcelona entró en el juego del PSG a domicilio, y buscará imponer su estilo en casa

El Barça salió de París con un empate muy valioso

El Barça salió de París con un empate muy valioso / Javi Ferrándiz

Patricia Martínez

Patricia Martínez

El Barça regresó a casa con el objetivo cumplido. Las culés se marcharon de la ida de semifinales de Champions disputada en París con un valioso 1-1 que les da una inestimable ventaja en la vuelta. Sobre todo teniendo en cuenta que la eliminatoria se decidirá en el Johan Cruyff, donde las culés no han perdido ni un solo partido desde su inauguración. Eso sí, el Barcelona no logró imponer su juego a domicilio e intentará cambiar las tornas en el fortín blaugrana.

Las culés bailaron en París al ritmo que marcó el PSG, uno más rápido al que ellas están acostumbradas. Las parisinas son probablemente el equipo europeo más dotado físicamente y aprovecharon su territorio para imponerse. El Barcelona dejó destellos de su estilo durante el partido, pero no logró tener el balón tanto como hubiera querido. Esto provocó varios sustos de un PSG muy fuerte en las contras y amante del juego aéreo. El gol tempranero de las culés minimizó el coste de la pérdida del dominio del juego, pero el Barça no acabó de estar cómodo del todo. Con todo, logró amoldarse a las limitaciones del campo y a las imposiciones del rival y sacó un buen resultado a coste, quizá, de renunciar un poquito a su esencia. Algo que las pupilas de Lluís Cortés intentarán cambiar en la vuelta del próximo domingo 2 de mayo.

El Barça debe aprovechar el Johan Cruyff para volver a mimar el balón, imponer su estilo de toque y, en definitiva, dominar una posesión que en la ida se le escapó. Las jugadoras tienen mucha confianza en poder rematar la clasificación en la vuelta. Se sienten cómodas en el Johan Cruyff, (los números hablan por sí solos) y saben que podrán recuperar protagonismo en su fortín. Si el Barcelona logra este dominio, ni siquiera las controvertidas decisiones arbitrales que empañaron el partidazo de las culés en París tendrán tanta importancia esta vez.