SEGUNDA DIVISIÓN B

El nuevo balón oficial de la Segunda B pincha

"Balón de playa", "insulto para el fútbol"... son algunas de las definiciones que futbolistas de Segunda B utilizan para definir el nuevo esférico oficial impuesto por la RFEF

El Sabadell ya ha jugado amistosos con el balón de la discordia

El Sabadell ya ha jugado amistosos con el balón de la discordia / sport

Lluís Payarols

Las dos primeras semanas de trabajo de los clubs de Segunda B han puesto de manifiesto las críticas de los protagonistas de esta categoría hacia su nueva 'herramienta de trabajo'. El nuevo balón oficial de la competición, según decisión de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), es el Adidas Errejota. Aparentemente un balón de garantía si tenemos en cuenta que fue el mismo que se utilizó en el pasado Mundial de Clubs disputado en Japón o el que se utilizará en el torneo de fútbol de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro. Sin embargo, los balones que están recibiendo los equipos de Segunda B, Tercera o División de Honor Juvenil no son de esa misma gama.

La calidad de los esféricos se cuestiona día a día a través del testimonio de jugadores y entrenadores. Cada balón tiene un coste aproximado de 34,95 euros para los clubs, con el logo de la RFEF estampado en él. El organismo federativo, además, da 30 esféricos a cada entidad, que son insuficientes para el trabajo de toda una temporada.

"Es el peor balón de los últimos años", explica el entrenador del Cornellà, Jordi Roger. Sus jugadores ya han podido comprobar alguno de sus defectos, como la poca resistencia y la facilidad para su vuelo de portería a portería, desconcertando a los guardametas.

Su homólogo en el Badalona, Manolo González, no dudó en expresar a través de su cuenta de Twitter su malestar por la imposición de este cuero, que considera "una auténtica vergüenza".

José Manuel Aira, entrenador del Albacete Balompié, fue uno de los primeros en definir al controvertido 'Errejota' como un "balón de playa", concepto propio de estas épocas estivales pero nada elogioso de lo que habñlamos es de un balón para afrontar competiciones oficiales de fútbol. "Si se quiere valorar el fútbol y darle valor a la categoría, hay que empezar por el balón con el que se juega. Es una falta de respeto", declaró el técnico manchego.

Otros se lo toman con ironía, como es el caso del CD Laudio, club que milita en la Preferente alavesa y que no está obligado a utilizar este esférico. Así expresan su 'respiro' por no tener que trabajar con esta pelota.  

Y entre los jugadores, más de lo mismo. El que fuera delantero de L'Hospitalet y Badalona y actualmente jugador del Mérida Pablo Morgado define el nuevo balón oficial como "insulto a nuestra profesión". 

Pese a todo, el problema no es nuevo aunque cause indignación. Así lo explica el portero del Cornellà Marcos Pérez, quien es uno de los habituales 'sufridores' de los balones oficiales que elige la RFEF: "Yo no los veo tan diferentes a los del año pasado. Los balones que tenemos nosotros siempre son malos. No es que sea este balón, el del año pasado también lo era, el anterior lo mismo y no lo veo tan, tan peor como el del año pasado, lo veo parecido".

El meta del Cornellà va más allá y lanza un aviso de cara a próximas temporada. "Fastidia que te traten como profesional y te den este balón. Ya que nos tratan como profesionales, que nos pongan el balón que usan en Primera y Segunda, que es el balón de profesional", apuntó.

El debate está servido a poco menos de tres semanas de que arranque la Liga. Las quejas se multiplican por las pocas prestaciones de un Adidas Errejota 'low cost' que, si no cambian las cosas, será el balón con el que tengan que jugar los clubs de Segunda B, Tercera y División de Honor Juvenil esta temporada. De momento, a los protagonistas de estas categorías no les queda otra cosa que el pataleo... y resignarse.