El Lleida Esportiu denunciará al Cornellà por los incidentes del domingo

El partido entre el Cornellà y Lleida Esportiu al parecer acabará en los juzgados. El conjunto ilerdense ha anunciado que presentará una denuncia contra el director deportivo del Cornellà, Andrés Manzano, y contra el club por los incidentes que se produjeron a la finalización del partido y que el árbitro, Alejandro Muñoz Ruiz, recogió en el acta.

“Mi asistente número uno me indica que presenció como una persona, que fue identificada por las fuerzas del orden como el director deportivo de la UE Cornellà, propinó un golpe con la mano abierta en la parte trasera de la cabeza al director deportivo del Lleida Esportiu, formándose de esta manera un enfrentamiento de personas en el que tuvieron que intervenir dichas fuerzas del orden”, dice el escrito. Asimismo, el director deportivo del Lleida Jordi Esteve denunciará a Manzano por agresión, aunque desde el club verde se rechaza este término y se habla de 'colleja'.  

Dolidos

El presidente de Lleida, Albert Esteve aseguró a Catalunya Ràdio que “lo acontecido en el túnel de vestuarios no es un buen ejemplo de relación entre clubes. Creemos que es una falta muy grave y esperábamos que el Cornellà se pusiera en contacto con nosotros, cosa que no ha hecho. No lo podemos consentir ni por nuestra afición ni por lo que representamos. Es una falta de respeto. El director deportivo, a nivel personal, presentará denuncia y como club haremos lo mismo contra Manzano y el Cornellà”. 

Estos incidentes fueron la culminación a la tensión del partido y que estalló con la celebración del gol por jugadores y técnicos locales. En este sentido, el entrenador del Lleida, Gerard Albadalejo, explicó que “algunos celebraron la victoria como si ganaran la Champions, pero la liga acaba en mayo”.

Comunicado

El Cornellà, por su parte, mediante un comunicado expresó “su total disconformidad con los hechos acontecidos en el túnel de vestuarios”. Y añade que el club “lamenta y condena la serie de improperios, ofensas abocadas y actos físicos entre miembros de las dos entidades, quedando empañada la buena imagen deportiva que dieron los dos equipos en el césped, así como la gran cordialidad entre aficiones”. 

Para acabar, apunta que “la rivalidad deportiva no tiene que ser obstáculo para mantener una conducta institucional ejemplar y responsable”.