Si ves esto en el pulpo, tíralo inmediatamente

El pulpo es uno de los alimentos más ricos de la gastronomía Española. Además de ser un plato exquisito como principal o tapa, es un molusco con grandes beneficios para nuestra salud. El pulpo tiene un alto nivel de zinc, que nos ayudará a mantener sano nuestro sistema inmunológico. Es perfecto para combatir enfermedades como asma, presión, arterial, diabetes y cicatrizar las heridas.

Sin embargo, como suele suceder con estos alimentos frescos, deben almacenarse correctamente en el congelador. Lo más recomendado es congelarlo durante dos o tres días para que se rompan las fibras musculares del pulpo y quede blando para cocerlo mejor. Esta tarea nos facilitará la cocción y no será necesario pasar más tiempo ablandándolo.

Si lo has guardado en el congelador y quieres descongelarlo para su cocción, lo ideal es hacerlo antes de que pasen 24 horas. Para mantenerlo en la nevera más tiempo, deberás cocinarlo y después guardarlo posteriormente, no más de tres días, antes de que se ponga en mal estado.

Para saber si el pulpo no está en estado óptimo para su consumo deberás fijarte en que la carne esté firme al tacto, si está viscosa o su color ha cambiado de rosado a negro, tienes que tirarlo inmediatamente. Si comes pulpo en mal estado puedes tener una intoxicación alimentaria. Si presentas vómitos, diarreas, dolor abdominal, fiebre, malestar o náuseas entre otros síntomas, deberás acudir al médico.