El soltero más vegano de 'First Dates' se desmorona al ver que su cita pide carne: "La carne es cancerígena y la leche también"

Sabrina es una italiana que adora España y está dispuesta a encontrar una nueva ilusión

Dos ideologías muy distintas

El soltero más vegano de 'First Dates' se desmorona al ver que su cita pide carne: "La carne es cancerígena y la leche también"

El soltero más vegano de 'First Dates' se desmorona al ver que su cita pide carne: "La carne es cancerígena y la leche también"

First Dates tiene como principal finalidad que sus participantes encuentren el amor o, al menos, empiecen a buscarlo. Con tantas citas a ciegas pasando por sus mesas, lo más probable es que alguno de los encuentros salga bien y que otros salgan francamente mal.

'First Dates' es un programa presentado por Carlos Sobera. Se estrenó en 2016, y tanto ha sido su éxito que ha sido proclamado como un programa de referencia de Cuatro. Los espectadores pueden disfrutarlo de lunes a viernes a las 21:05 horas.

Los comensales son los que se presentan delante de las cámaras, casi sin ningún tipo de filtro ni contraste. Y es que algunas historias son tan asombrosas que cuesta creer que sean verdad. 

El programa junta a parejas en una cita a ciegas. Estos participantes mantendrán una conversación durante la cena en la que se conocerán y verán si realmente son compatibles o no. Al final del encuentro, decidirán si han tenido gustos afines y quieren seguir conociéndose, o si, por lo contrario, prefieren no saber nada el uno del otro.

Sabrina, es una italiana que adora España, siempre quiso vivir aquí y hace unos años ya que lo dejó todo para quedarse en Canarias. Cuando Nacho su cita ha llegado, le ha entrado la risa al ver que era tan bajito como ella.

Nacho, por su parte se enamora cada día "de los gestos de la vida". Tras pasarse 15 años trabajando como economista ha decidido hacer de su gran pasión, la música, su nuevo trabajo.

Durante la cena, Sabrina ha escogido un solomillo para cenar, una decisión que ha molestado mucho a Nacho. El soltero mantiene una alimentación basada en plantas porque “no haces daño a nadie y es un consumo responsable” por lo que se ha pedido una hamburguesa de calabaza y se ha sorprendido muchísimo al saber que su cita se pedía un solomillo:

“Ahora mismo hay una guerra en Ucrania por tierras de cultivo que son totalmente prescindibles porque son para ganado y no nos hacen ninguna falta. La carne es cancerígena y la leche también, no tienen ningún sentido”, le ha dicho.

 Tampoco ha querido tomar postre porque “las tierras que se destina al cultivo del tabaco, el café o el cacao influyen en la deforestación y en la pobreza de otros sectores”. Una ideología que no ha coincide para nada con la de la italiana y que les ha llevado a no congeniar y abandonar el restaurante cada uno por su lado.