Viernes de descanso... y un día más para hacer caja en Mónaco

Vista panorámica del puerto de Mónaco

Vista panorámica del puerto de Mónaco / EFE

Laura López Albiac

Laura López Albiac

El Gran Premio de Mónaco es diferente al resto de pruebas del Mundial en muchos aspectos. Y uno de los que más llaman la atención es que los coches de Fórmula 1 no ruedan aquí los viernes. Los dos primeros entrenamientos libres en este histórico trazado se disputan tradicionalmente los jueves y hay una explicación para ello.

En los años 50, en sus primeras ediciones, el Gran Premio de Mónaco abría el calendario de la temporada de Fórmula 1 para hacerlo coincidir con el Día de la Ascensión, que se celebraba el viernes, con distintos actos religiosos y festejos que impedían competir en la pista, al tratarse de un circuito urbano.

Actualmente, la Ascensión ya no coincide por fechas con la carrera del Principado, pero la tradición se mantiene y los Fórmula 1 siguen sin salir a rodar los viernes. Eso sí, ahora entran en acción los coches de la Fórmula 2, GP3 y Porsche Cup.

La realidad, pues, es que la interrupción en el programa sirve para alargar un día más el gran premio y obliga al personal de los equipos, pilotos, periodistas y  aficionados a llegar un día antes al circuito, a pasar una noche más alojado en los caros hoteles de Mónaco y a consumir más en sus tiendas y restaurantes. Puro negocio.