Djokovic 'desactiva' el cañón de Isner

Djokovic debutó en las Finales ATP ante Isner

Djokovic debutó en las Finales ATP ante Isner / AFP.

David Boti

David Boti

Novak Djokovic es una especie de tenista en extinción. Capaz de desesperar a sus rivales sin necesidad de cuajar un partido excelso, resuelve sus duelos con enorme facilidad cuando está enchufado al resto.  Este lunes tuvo enfrente en su debut en las Finales ATP a John Isner y el estadounidense lo sufrió en sus propias carnes (6-4 y 6-3). 

Nole’ avisó una vez. Volvió a avisar pocos minutos después. Y rompió el partido a la tercera.  Lo del serbio al resto es para que se estudie en las escuelas de tenis de todo el mundo. Es capaz de adaptarse al servicio de su rival a las mil maravillas. Saber leerlo es una de sus mayores virtudes y no es nada fácil cuando enfrente tienes a un gigante que sobrepasa los 205 centímetros de altura y que, además, cuenta con auténtico martillo en el brazo, prueba de ello son los 13 ‘aces’ con los que acabó su primer partido del torneo. 

Con el paso de los minutos y la rotura favorable para Djokovic, cada uno de los peloteos de más de cinco golpes fueron cayendo, paulatinamente, del lado del número uno del mundo. Era una evidencia. El físico no es, precisamente, una virtud del gigantón de  Greensboro y este lunes en el O2 de Londres se pudo volver a apreciar. Vive, principalmente, de su servicio y cuando tienes a uno de los mejores restadores del circuito lo acabas pagando. Por si fuera poco, el de Belgrado desesperó a Isner en el tramo final del primer set. Lo atrajo a la red una y otra vez y lo fue batiendo golpe a golpe hasta decantar el partido a su favor.

El guión no cambió en el segundo parcial. El ‘yankee’ solo sumó dos puntos al resto  y ‘Nole’ certificó su victoria número 50 de la temporada, la primera en Londres batiendo a Isner en la red, de nuevo, con un impecable revés cruzado.

Un año atípico

Djokovic puede cerrar una temporada de ensueño tras un inicio titubeante en el que, incluso, se especuló con una posible retirada. Con Wimbledon y el US Open en la mochila y  el número uno como credencial, coronarse, por sexta ocasión, en las Finales ATP supondría el broche de oro a un año repleto de contrastes para el serbio. Nadie lo esperaba hace unos meses, pero el serbio jamás dejó de luchar. Como buen guerrero que es. Ahora, en Londres, Djokovic no tiene intención de parar y este lunes dio el primer paso.

Cristiano no se lo perdió

El delantero de la Juventus, Cristiano Ronaldo, aprovechó el parón por los compromisos de selecciones para disfrutar del mejor tenis del planeta junto a su pareja, Georgina Rodríguez, y también junto a su hijo, Cristiano Jr. El luso presenció en directo el duelo entre Djokovic Isner desde uno de los palcos privados del O2 Arena.