Malen rescata al PSV sobre la bocina

Los goles de Malen valen oro para el PSV

Los goles de Malen valen oro para el PSV / AFP

SPORT.es

Un doblete de Malen permitió al PSV salir con los tres puntos de Chipre, donde dejó su impronta el catalán Jordi Gómez, ahora en las filas del Omonia, con un auténtico golazo que veremos repetido estos días en las televisiones de todo el mundo. Malas noticias para el Granada el triunfo de los granjeros. Habrá que pelear la primera plaza de grupo.

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Europa League

1
2
Alineaciones
Omonia
Fabiano; Hubocan, Luftner, Lang, Lecjaks; Jordi Gómez; Papoulis (Asante, 80'), Gomes, Tzionis, Bautheac; Duris (Kakoulis, 80').
PSV
Mvogo; Hendrix, Teze, Boscagli, Mac; Götze, Sangaré, Thomas; Ihattaren, Malen, Madueke (Fein, 83').

Lo que en principio parecía un partido fácil para el equipo neerlandés, se le complicó poco antes de la media hora de juego. Jordi Gómez, canterano del Barça, ejerció de niño más listo de la clase y puso al Omonia por delante en el marcador con un golazo de 'highlights'. El colegiado señaló una falta en campo chipriota y sin pensárselo dos veces buscó puerta encontrándola con un misil aire-tierra que sorprendió a Mvogo.

Le tocó remar entonces al PSV, que sólo vio la luz sobre la bocina de la primera parte en una incursión de Madueke por la siniestra que terminó con el gol de Malen. Aun así, a los puntos había ganado el primer 'round' el Omonia, que promete dar batalla en el grupo porque tiene un buen bloque de jugadores, quizás sin el pedigrí de otros conjuntos pero que sabe tocarla.  

El paso hacia delante que dio el PSV tras el descanso, sin embargo, hizo virar el partido de su lado. La tuvieron Max Teze, pero no era el día. Mientras tanto, el Omonia se defendía como gato panza arriba buscando una contra salvadora que le permitiera cantar bingo. En el último tramo del encuentro Malen tuvo el tanto de la victoria para los neerlandeses. Falló. Quedaba, no obstante, la última bala, y la aprovechó el bigoleador Malen para dar el triunfo a su equipo en el último suspiro después de un fallo en cadena de la defensa del Omonia. Premio merecido después de una gran segunda parte.