Vaclik y su fugaz paso por el fútbol neerlandés: cuatro días en el De Graafschap

Tomas Vaclik jugará este domingo ante Países Bajos uno de los partidos más importantes de su carrera, en los octavos de final de la Eurocopa. El portero de la selección checa y del Sevilla (acaba contrato el 30 de junio y no seguirá en el club hispalense) a buen seguro recordará su fugaz paso por el fútbol neerlandés. 

Cuatro días. Literalmente: ese fue el periplo de Valcik en la Eredivisie. Firmó por el De Graafschap, un equipo ascensor de la ciudad de Doetinchem, en julio de 2011, cuando tenía 22 años. 

Había firmado un contrato por tres temporadas y llegó a ser presentado a lo grande en el hotel Villa Ruimzicht de Doetinchem. El club presumía de haber logrado su contratación pese al interés de otros clubes más potentes de la liga neerlandesa, después de que Vaclik hubiera despuntado en el Europeo sub-21 de Dinamarca, en el que llegó a semifinals y fue nombrado major portero del torneo.

“Creo que es un buen paso para mi futuro, este es un club tranquilo y espero poder crecer”, declaró Vaclik durante su presentación.

Sin embargo, los médicos del De Graafschap no dieron el visto bueno a su revisión: le detectaron un problema cardíaco que, según su opinión, le inhabilitaba para jugar al fútbol. El club le rescindió el contrato.

Vaclik, sin embargo, no tiró la toalla. Regresó a su país para firmar por su club anterior, el Viktoria Zizkov. Los médicos de su país no pusieron ninguna objeción a que continuase jugando al fútbol. “Quizá los cardiólogos neerlandeses fueron demasiado escrupulosos”, explicó su agente semanas después. 

El meta checo llegó a temer por su carrera, pero con el paso de los años ha logrado construirse un buen currículum deportivo. Firmó por el Sparta de Praga en 2012 y en 2014 se fue al Basilea. Cuatro años después llegó al Sevilla, con el que se proclamó campeón de la Europa League.